El pasado 28 de junio del 2020, el toreo recibía una triste noticia: Joaquin Ramos, mítico veedor de toros, hombre de confianza de José Tomás y apoderado de Alejandro Talavante, fallecía a los 54 años tras sufrir un infarto al finalizar la intervención quirúrgica que tenía el objetivo de extirparle la vesícula. Se iba por tanto uno de esos hombres irrepetibles, un conocedor de cada rincón del campo bravo, un hombre con talento, y por supuesto un gran padre y un magnífico esposo.
Joaquín era ese tipo de personaje que no dejaba indiferente a nadie, profesional intachable y fiel escudero de aquellos que confiaron en él. Fruto de ello han sido los continuos homenajes que distintas personalidades del toro le han rendido en estos más de tres años desde su fallecemiento.
Uno de los homenajes más especiales vino a cargo de su hija Triana, una gran amante de la carrera de su padre y admiradora profunda de un hombre que lo fue todo para ella. Mujer de fuerza y raza, no dudó ni un instante en llamar a sus amigos para rendirle homenaje a su padre, un hombre al que el golf también le ocupaba parte del poco tiempo que tenía.
La primera edición de este Torneo Memorial a la figura de su padre se presentó en otoño de 2020, fue en plena pandemia, pero eso no fue óbice para que amigos de su padre estuvieran allí para arroparla. Algo que también ocurrió el pasado año y que este no pudo ser menos.
Al campo talaverano de Palomarejos Golf acudieron el pasado fin de semana personajes del mundo del toro como Joselito, José Tomás y Juan Ortega, el apoderado y ganadero Enrique Martín Arranz o su propia hija Triana Ramos entre otros invitados. En esta ocasión no estuvo presente en este III Torneo Memorial Alejandro Talavante, amigo personal de Joaquín, el cual si estuvo en anteriores ediciones.
