Ha comenzado una temporada igual que terminó la anterior:
manteniendo esa senda de regularidad que es la capaz de mantener el status de
un torero como Daniel. Y es que Luque sabe que no puede dar un paso atrás no
sólo porque perdería todo lo andado, sino porque el sistema taurómaco actual lo
derribaría del podio en el que se erige. Tiene el de Gerena la mente fresca, preparada
y segura para afrontar sus dos tardes en Sevilla, y con esa impronta recibe a
CULTORO en las horas previas a su primer paseíllo baratillero.
«El inicio de temporada ha sido bueno y entre la temporada de
América y España apenas he parado, pero quizás lo del otro día en Valencia fue
un triunfo, porque es plaza de primera. Busco más rotundidad todavía. Es lo que
uno sueña durante todo el invierno», asegura Daniel en relación a
su inicio de campaña.
Acaba de regresar de América, donde aún le quedan varios
compromisos como Aguascalientes o la gran presentación de Rodolfo Rodríguez
«El Pana» en la Santa María de Querétaro, en la que actuará junto a
Enrique Ponce. Sabe que el triunfo al otro lado del charco es crucial para
volver el invierno próximo, y con esa mentalidad señala que «sobre
todo el ir a América para mí es muy importante. Quedan dos compromisos por
cumplir. He estado en Ferias importantes y han sido casi todo triunfos,
especialmente Guadalajara, que moral y profesionalmente me ha dado mucho. Estoy
contento, y desenado que llegue Sevilla y Madrid para demostrar el gran momento
que tengo y dar el salto importante en mi carrera.
Se habla de que
Daniel Luque ha cambiado, que Daniel Luque es distinto al de otras temporadas, y
él mismo dice que «sí. Los toreros necesitan tiempo y eso es
todo lo que se necesita para construir una gran obra. No se hace en un día.
Poco a poco, tanto personalmente como profesionalmente vas creciendo y eso se
refleja luego en la plaza. Ahora mismo me encuentro en un momento muy bueno,
pero me quedan muchas cosas por demostrar. Los inviernos también importan
aquí».
Daniel Luque está demostrando un temple inusual, que
maravilla y encandila. «Eso es importante, es lo que llevo dentro, y
al final es una buena medicina para los toros, que tanto por malo como por
bueno es importante el temple. El temple es todo en un torero. Con la muleta
siempre los toros no terminamos de encontrarlos, pero cuando llega el temple es
todo. Tengo una facilidad ahora innata, que me sale sola, y es como se llega
arriba, haciéndolo con naturalidad».
Arles, Sevilla,
Madrid… fue la pasada una temporada bonita en la que triunfó en esos
escenarios con fuerza. «Esta creo que también será una
temporada bonita. La afronto con ilusión y con ganas de expresar todo lo que
llevo dentro y que en los sitios importantes, con un punto de suerte, pueda
demostrar todo lo que llevo dentro, que al final en la plaza se une al punto de
suerte para no fallar el día clave».
Sobre el objetivo previsto de cara a los próximos meses, el
de Gerena dice que no se lo piensa. «No. No pienso así. Uno no piensa en
nada de lo que va a hacer. Al final los vas afrontando como va, y coger el hilo
de la temporada es importante para no perder la regularidad en los sitios
importantes. Eso es lo que marca una temporada».