«Estoy muy contento, muy pleno y muy lleno por dentro. Fue una tarde de muchas sensaciones, donde Alicante volvió a mostrarme su cariño, su admiración y su reconocimiento. Me quedo con lo que sentí en la plaza». Así reflexiona Andy Cartagena sobre su triunfo del domingo en Alicante cuando salió a hombros tras cortar dos orejas y perder otras dos por el uso del rejoneador definitivo.
Una tarde sólida y artísticamente creativa. «Los caballos estuvieron a un nivel muy bueno. Cártago en el primero rozó la perfección, apostando mucho y llegando mucho a la cara del toro» explica Andy Cartagena. «Luego con el cuarto había que apretar y ser más Cartagena que nunca. Con Ginocente sentí cosas muy bonitas, cuando le quite la cabezada y arriesgó tanto. Fue todo precioso», subraya.
Una temporada importante por delante para un Andy Cartagena que ha vuelto por todo lo alto. A base de triunfos ha recuperado sitio y su toreo es más hondo y más cargado de matices que nunca bajo la personalidad marca de la casa. «La personalidad es lo que no se puede perder nunca y esa va en mis genes. Ahora he ganado en perspectiva, en argumento y sentar las bases de cada faena y en resolver las incógnitas que plantea cada toro», sostiene.
La próxima cita este próximo fin de semana en la plaza madrileña de Las Rozas de Puerto Real.