Hablar de que Andrés Roca Rey es el torero del momento no es faltar a la verdad. Y lo decimos por los continuos triunfos de un espada que este año ha salido nada más y nada menos que por la Puerta del Príncipe de Sevilla por primera vez en su carrera. Fue una tarde donde paseó las tres orejas de su lote con el hierro gaditano de Núñez del Cuvillo y en el que volvió a colgar el “No hay localidades”.
Pero Andrés aún tenía dentro un sueño por cumplir fuera de triunfos en plazas como Madrid, Bilbao o la antes mencionada de Sevilla, un festejo que supuso un nuevo impulso en su carrera, que le colocó en un lugar que hasta el momento no había ocupado. Ese sueño era el poder torear junto a uno de sus ídolos, ese torero que tuvo la oportunidad de ver por televisión y con el que anhela con poder hacer el paseíllo.
Hace algunas semanas los compañeros de Clarín entrevistaron a Roberto Domínguez, apoderado de Andrés Roca Rey, quiena la pregunta de si “sería histórico ver algún día en el ruedo a José Tomás y Roca Rey juntos en el ruedo”, contestó: “Él quiere, pero entiendo que las circunstancias y las carreras no tienen nada que ver unas con otras”. El vallisoletano lleva un tiempo intentando hacer cumplir el sueño de su poderdante, un espada que se ha convertido en un bastión indispensable de la tauromaquia de nuestros días, triunfando y llenando prácticamente las plazas cada tarde que se anuncia.
Ese sueño que busca cumplir, sí o sí, un torero que buscó el acercamiento con el torero de Galapagar al lanzarle el rabo al hijo de José Tomás tras pasear los máximos trofeos del segundo de su lote el pasado domingo en la plaza de toros de Estepona. Un gesto que no pasó inadvertido para los allí presentes y que, quién sabe, sí convencerá a un torero que todavía este año no está anunciado en ninguna plaza europea. Veremos si hay fumata blanca pronto, ya sea con Andrés en el cartel o sin él.
Andrés lanza el rabo al hijo de José Tomás presente en la plaza
— Andrés Roca Rey (@RocaRey) July 9, 2023
Sevilla y la valoración de la prensa de uno de los triunfos más importantes de su carrera
“Su valor devolvió a la tauromaquia la plenitud del infarto en los tendidos, la realidad de la verdad de lo que pasa ahí abajo y la distancia de lo que sólo algunos son capaces de hacer”, nos contaba Patricia Navarro en las páginas de La Razón aquella tarde del pasado 21 de abril donde el torero nacido en Lima conseguía descerrajar la Puerta del Príncipe de Sevilla, un coso que se le resistía en los últimos años.
“Este es el signo de los nuevos tiempos, la confirmación de un ídolo de masas, -como en sus tiempos lo fue El Cordobés-, que conmueve, arrebata y entusiasma a un público que acude a la plaza con el pañuelo en la mano” escribía Antonio Lorca en su crónica para El País en un tarde donde Andrés dejó constancia de el momento por el que pasaba.
“Un soberbio último ejemplar de Cuvillo llamado ‘Halcón’ le da alas al Cóndor para voltear una tarde sin huella sobre la campana con corrida de triste presentación, desfondada y sin clase” publicaba aquel día Vicente Zabala de la Serna tanto en la edición impresa y digital de El Mundo, una crónica que buscó diseccionar todo aquel triunfo incontestable para unos y de menor peso para otros
“Una tarde que acabó en triunfo apoteósico para un Cóndor que ya vuela en solitario gracias a ese Halcón que se le cruzó en su camino y que le propició la tan ansiada salida a hombros en un festejo nuevamente marcado por la deriva presidencial” publicaba este que les habla en este medio aquel 21 de abril en una tarde donde trenzó el paseíllo junto a Diego Urdiales y José María Manzanares.