Noé Gómez del Pilar selló en Céret este domingo, 16 de julio, una de las tardes de la temporada en Francia. Frente a una dura corrida de José Escolar que hirió tanto a Álvaro de la Calle -con una cornada de tres trayectorias- como a Javier Cortés -en el rostro-, el toledano dio la cara con creces. Y paseó una de las orejas con más peso que se han cortado en estos años tanto en ese coso como en el sureste francés, debiendo dar dos vueltas al ruedo por la no concesión por parte del palco del segundo premio.
Horas después de ese triunfo, Noé Gómez del Pilar habla con la redacción de Cultoro para valorarlo “Es verdad que se puso la tarde difícil. Ya el primer toro no marcaba cosas buenas y Álvaro quiso estar bien. Expuso en muchos momentos y a la hora de estoquearlo se tiró de verdad y lo cogió. Todos sabemos la dureza de este tipo de corridas, pero había que echar la tarde hacia adelante”, resalta, loando también la actitud de Javier Cortés.
Así vivió las dos lidias Gómez del Pilar: «Creo que ha sido la vez que más rotundo me ha visto esta plaza«
Fueron dos lidias que calaron en la afición de Céret, dos lidias que llegaron con fuerza a su forma de entender una corrida de toros por la inteligencia y resolución con la que Gómez del Pilar planteó faena a sus dos animales: “El primero fue un buen toro. Le cogí rápido la medida desde la salida y lo gocé. Sentí esos olés rotundos. Creo que ha sido la vez que más rotundo me ha visto esta plaza. El único que no estuvo de acuerdo fue el presidente al negarme la segunda oreja. También te fastidia eso. Pero tengo que agradecer a la afición que me pidió esa segunda vuelta al ruedo”, destaca el toledano.
Y recuerda que “con el toro de Escolar en Madrid tengo la espinita de haberme quitado la ayuda con la derecha, y ayer lo vi muy claro con eso, y pude torear al natural por esa mano. Y hubo otra serie también por ese lado que fue muy buena también. Uno, con los años, se ve con ese poso delante de los animales”.
El otro toro “lo puse tres veces al caballo y luego se vino a menos. Pero con dos puyazos hubiera sido buen animal. Venía con embestida franca y colocando la cara”, resalta del astado de Escolar que le tocó en segundo lugar.
“Céret fue la primera plaza de Francia que me contrató e iba muy mentalizado este domingo”
Y habla sobre las posibles sustituciones que podrán saltar en próximos días en ferias francesas: “Es verdad que las sustituciones no son agradables para nadie. Los toros cogen. Ojalá y sea un toque de atención más para cualquier cosa. Céret para mí siempre ha sido una plaza que me ha gustado mucho. Fue la primera plaza de Francia que me contrató e iba muy mentalizado y muy tranquilo. Son momentos en los que tiene que hacer de tripas corazón, exponer y sacar tu verdad, como creo que hice”, concluye.