Vivimos unos momentos donde no es fácil dejarlo todo para irse a vivir al campo. Son momentos donde la juventud prioriza las grandes ciudades en detrimento de esa España a la que llaman vaciada. Pero la pasión por el toro bravo hace que muchas de esas personas cambien el rumbo de su vida y apuesten por un trabajo duro y sacrificado, pero con una enorme recompensa. Por todo ello, muchos de esos que tenían pensado abandonar la España rural bajan una marcha y se replantean si su futuro está aquí o en otro lugar.
Suelen ser personas relacionadas con el campo bravo, hijos, sobrinos o nietos de hombres de campo, de esos mayorales y vaqueros que dieron su vida por el toro bravo. Pero en este oficio también podemos encontrar picadores que ven como se puede complementar el trabajo en la plaza y en el campo. Pese a todo ello, hay muchos ganaderos que no encuentran ese personal necesario para llevar con soltura su explotación, teniendo que hacer uso de llamativas ofertas de empleo en distintas webs. Amén de estas páginas también está disponible la Asociación Nacional de Mayorales (UMAVACAM), lugar donde se forman aquellos que quieren trabajar junto al toro bravo.
En los últimos años, se ha visto como aumenta la presencia de extranjeros en las fincas, personal venido del otro lado del charco con relación directa con el este animal. Una opción que está convenciendo a unos ganaderos que ven como encuentran a un número importante de personal cualificado, esos que no necesitan formación y que están habituados a bregar con este tipo de animales. Son personas que emigran a España buscando una calidad de vida mayor al estar muy complicada la situación en su país de origen.
El trabajo en el campo es una labor muy sacrificada, sin duda, para trabajar en esta profesión hace falta algo más que ganas: se necesita una constancia y un sacrificio a prueba de bombas. Es un oficio bonito, pero muy exigente, que requiere ser un gran caballista y estar dispuesto a jugarte la vida en más de una ocasión. Aquí el toro no perdona, por eso hay que estar mentalizado para cruzar la línea si el toro lo requiere.
Una de esas ganaderías pioneras en buscar trabajadores a través de Internet fue la divisa salmantina de Castillejo de Huebra, hierro que colgó en redes sociales un mensaje para encontrar a ese trabajador que se adecuara a las labores que se requerían en dicha explotación ganadera: “Se busca un trabajador para finca en Salamanca. Muy bien ubicada. Para trabajo de labor y manejo de ovino. Interesados por mensaje directo”. Una oferta de trabajo publicada el 9 de marzo, la cual desconocemos si ya se cerró, o, por el contrario, aún sigue en vigor al tratarse de un oficio muy específico que requiere de un candidato muy concreto.
ANUNCIO: Se busca un trabajador para finca en Salamanca. Muy bien ubicada. Para trabajo de labor y manejo de ovino. Interesados por MD.
— Castillejo de Huebra (@CastillejodeH) March 9, 2023
Buceando por las distintas webs de búsqueda de empleo podemos encontrar ofertas como esta: “Se ofrece contrato indefinido, un mes de vacaciones, vivienda en el lugar de trabajo. Abstenerse gente sin documentación en regla y sin experiencia en ganadería brava” o “se necesita vaquero para finca en Salamanca, salario a convenir”. Ofertas muy concretas -que puedes consultar en este enlace-– destinada únicamente a aquellos trabajadores que puedan ejercer esta actividad tan especifica, para la que se necesita un tipo de personal cualificado y con experiencia en estas lides. Un trabajo para el que también se ofrece una vivienda en la propia finca.
Un trabajo que requería de unos requisitos muy específicos para poder optar al mismo:
- Vivir en la finca
- Manejo de tractor
- Carnet de conducir
- Reparación de alambradas
- Experiencia con ganado vacuno: ganado bravo y manso
- Colocación de crotales, altas y bajas
- Montar a caballo
- Apartar animales a caballo
- Saneamiento