El torero Adrián de Torres ha vivido, en la tarde de este sábado, un duro trance al escuchar los tres avisos de la faena al primer toro de su lote en la localidad segoviana de Riaza: tras alargar la faena al animal del hierro leonés, las diversas intentonas por estoquearlo fueron en balde hasta que apareció el tercer pañuelo en el palco y se debió entrar a chiqueros al animal.
Ángel Sánchez e Isaac Fonseca completaron el festejo, saliendo a hombros el mexicano con cuatro premios
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Riaza (Segovia). Corrida de toros.
Toros de Valdellán.
Adrián de Torres, silencio tras tres avisos y
Ángel Sánchez, silencio en ambos.
Isaac Fonseca, dos orejas en ambos.
El hierro de Valdellán lidiado esta tarde en Riaza
En el festejo se lidió una corrida perteneciente al encaste Santa Coloma, que empezara a crear en 1905 Enrique Queralt y Fernández-Maquieira, Conde de Santa Coloma tras una primera compra de la mitad de la ganadería de Eduardo Ibarra a Manuel Fernández Peña. Un primer paso que le puso en el camino de ese objetivo que se había marcado y que con el tiempo consiguió.
Sería en 1912 cuando adquiriría a Rafael Rueda Osborne, Marqués del Saltillo, un hato de vacas. De esta manera consiguió unir en una sola ganadería las dos ramas de la casta Vistahermosa: Barbero de Utrera-Arias Saavedra y Varea-Picavea de Lesaca. A mediados de los años 20, el Conde de Santa Coloma fue realizando varias ventas de ganado de las que surgieron las tres líneas de las que se compone el encaste, pudiendo llegar a considerarse un encaste diferente: Coquilla, Graciliano Pérez-Tabernero y Buendía, nutriéndose la ganadería leonesa de animales de la rama Graciliano vía Pilar Población del Castillo.