Hablar del tema monetario en el mundo del toro es algo que siempre ha estado mal visto; saber cuanto gana un determinado torero se ha llevado con sigilo, básicamente para no influir en las negociaciones con otros compañeros, algo que podía torpedear éstas y provocar una negociación a la alta con otros toreros de similar categoría. Pese a ello, hay algunos empresarios que ya hablaron con luz y taquígrafo sobre los emolumentos de ciertos toreros en la primera plaza del mundo como el proprio Simón Casas.
Como ya reflejamos en anteriores publicaciones y siempre bajo los criterios y textos de la última Resolución del 25 de febrero de 2023, de la Dirección General de Trabajo, que sustituyó a dicha resolución del 10 de enero de 2020, los matadores de toros se dividen en tres grupos según los festejos toreados el año anterior. Unos honorarios que fluctúan según el grupo al que pertenezcan y la categoría de la plaza donde comparezcan.
Siempre hablamos de retribuciones mínimas, aquello que frecuentemente en el mundo del toro citamos como ‘mínimos’. Hay un gran número de espadas que son contratados por lo que marca el Boletín Oficial del estado (BOE), otros con mayor caché no se ciñen a estas tablas, ya que su propio estatus de figura hace que la base mínima a percibir sea mucho mayor. Los toreros también verán aumentados sus emolumentos si los festejos son televisados, aquí subiría sensiblemente debido a los derechos de imagen, algo que también está estipulado y recogido en el BOE.
En este caso, al hablar de Madrid, nos centraremos en las plazas de toros de primera categoría. Para matadores de toros queda especificada en el BOE una reducción general del 10 % sobre el importe bruto establecido en las tablas generales vigentes en cada temporada, incluyendo todos los conceptos (salarios de cuadrilla, gastos generales y honorarios estrictos del matador en cuestión. Una feria de final de temporada, que hasta hace pocas temporadas los toreros figuras rehuían, algo que ha cambiado sensiblemente de la pandemia.
Las figuras (de forma lógica) tienen un caché muy superior al mínimo establecido en los tres grupos de matadores
Según dicha actualización, un matador de toros del Grupo A percibirá un mínimo de 22.313 € en una plaza de primera, respecto a los 21.107 € que percibía antes de la modificación. Por su parte, uno del grupo B tiene base mínima de 17.004 € en plazas de primera, una cifra inferior a los 15.873 € que marcada en el anterior convenio. En el último de los casos, la retribución varía sensiblemente si se trata de un espada del grupo C, este tendrá en 2023 unos mínimos de 15.304 € en una plaza de primera por los 14.286 € de antes.
Este tipo de mínimos no afecta a la gran mayoría de los toreros anunciados esta Feria de Otoño, espadas como Morante de la Puebla, Julián López ‘El Juli’, Sebastián Castella, Alejandro Talavante, Daniel Luque, Paco Ureña, Juan Ortega, Ginés Marín o Pablo Aguado no entran en ese grupo al tener un caché por encima de los mínimos estipulados en la Resolución del 25 de febrero de 2023, de la Dirección General de Trabajo.
Del otro grupo de toreros más humildes anunciados en la Feria, varios de ellos cobrarán unos emolumentos sensiblemente superiores, mientras que los toreros y novilleros restantes recibirán ese mínimo estipulado por ley más los derechos de imágenes correspondientes al ser festejos televisados por OneToro, canal que bastante hace ofreciendo festejos que pagó a precio de oro en ese contrato leonino que ahora hacen maravillas por salvar.