Jorge Molina, García Pulido y Cristiano Torres, que hacía su presentación, trenzaban el paseíllo este 5 de octubre en la segunda novillada de la Feria de Otoño con un encierro de Fuente Ymbro.
Jorge Molina deja detalles en su primero pero la espada borra todo mérito
Cuatro kilos más de la media tonelada pesó el abre plaza primero de la tarde, de pelo castaño y de nombre «Lavandero», con el hierro de Fuenteymbro, que ya mostró poco celo en el capote de Jorge Molina, el cuál no pudo estirarse a la verónica. Buen quite por tafalleras de Molina, en la que el novillero lo templó mucho. Más que eficiencia mostró la cuadrilla de banderilleros en su tercio, antes del brindis al público de su jefe de filas, que comenzó por bajo su labor con la muleta. No tuvo el utrero una embestida clara, por falta de clase y echando la cara arriba al final del muletazo, pero Molina lo sometió en una meritoria tanda al inicio. Luego se puso aún más protestón el castaño novillo. Por el izquierdo le probó el animal al novillero pero consiguió hilvanar un par de naturales ligados. Luego se paró el utrero y todo lo demás ya fue de más, aunque tampoco fue mucho. Dejó una estocada trasera y baja mientras sonaba el aviso, sonando palmas para el de Ricardo Gallardo y pitos cuando salió a saludar unas leves palmas.
García Pulido deja momentos de gran belleza al segundo, pero la espada reduce el premio
Tampoco se dejó torear de capa el segundo, otro torito de Fuenteymbro , que tampoco mostró gran bravura en varas. Tras el efusivo brindis de García Pulido, comenzó este la faena con doblones, sacándose al utrero al tercio. Le dió sitio Pulido al utrero y mostró el animal más chispa, clase y humillación y en la segunda tanda se vieron buenos derechazos coreados por el público. Ya rugió la plaza en esos derechazos y también en una tercera tanda más profunda. Al novillo había que darle tiempo entre tanda y tanda y al natural llegó el éxtasis, con dos naturales largos y lentos. Pero el novillo empezó a bajar la persiana. Naturales de uno en uno con otro espléndido y a por el acero, ya que al novillo se le acabó el depósito. Ayudados por alto con enjundia con una trincherilla de cartel. Sonó el aviso antes de esta tanda. Pero un pinchazo y una estocada caída redujo el premio a una ovación con saludos, ovación que también se llevó el novillo en el arrastre.
Faena aguerrida de Cristiano Torres en su presentación, en la que no pasó mucho
Otro novillo que no quiso capa de salida el tercero, utrero también castaño ( llevamos tres) y de similares hechuras, aunque esté un poco menos toro, aunque sin desmerecer en presencia. Se dejó pegar sin grandes alardes de bravura el utrero, este «Soplón», número 36, de 510 kilos, nacido en marzo del 2020, novillo de la presentación en Madrid del novillero zaragozano Cristiano Torres, que dejó el brindis en los micrófonos de televisión. Y de rodillas comenzó la faena, sacándole la muleta por la espalda y tratando de torear en redondo en esa postura, cosa que no fue posible. Luego el novillo pidió algo más de sitio, al ponerse el novillero muy encima del utrero, que quería más suavidad que batalla. Siguió esa tónica Cristiano Torres y el novillo se defendió más, tirando derrotes con media arrancada. Al final se llevó la voltereta el novillero, afortunadamente sin más consecuencias. Entre pinchazos sonó el aviso, dejando a la cuarta un estoconazo sin puntilla. Silencio para el de Fuenteymbro y silencio tras aviso para Cristiano Torres.
Detalles de Jorge Molina con el incierto cuarto
Embistió recto al capote de Jorge Molina el cuarto, aunque tuvo después buen tranco cuando lo llevaron a la jurisdicción del picador. Se defendió en la primera vara , siendo más fijo en la segunda. Bien la cuadrilla en banderillas ante la espera del utrero, que medía una barbaridad pero que pegó un arreón en el tercer par. Tras el brindis personal, se lo sacó a la segunda raya, Pulido, para torear con la mano derecha. Mostró nobleza el animal, castaño listón de capa, pero falto de humillación y justo de raza por el lado derecho, dónde sacó el novillero algún derechazo estimable. Se vino recto otra vez por el izquierdo el animal en el primer intento de natural, siguiendo después pases con la zurda en las que el novillo probó y amagó con hacer por el torero. Luego ya el novillo se dejó algo pero la faena estaba hecha y Pulido se fue a por el estoque. Dejó otra estocada baja con el toque de clarín de fondo y fue silenciado, cómo lo fue el arrastre del utrero.
Faena de valor de García Pulido ante un novillo que terminó orientado
Sí se dejó torear el quinto, un precioso ejemplar de pelo negro listón, por parte de García Pulido, que dejó dos verónicas y media de bella factura. Sin apreturas se dejó pegar aunque con fijeza en el peto y tras banderillas, brindó el novillero al público para intentar torear en redondo de rodillas, antes de otra tanda, ya de pié, por dónde el novillo mostró sosería y falta de humillación. Pareció que iba mejor por el pitón izquierdo tras un pase de pecho pero luego al natural, se quedó corto e hizo hilo el de Gallardo, llegando a quedarse en la cadera del novillero toledano en un natural. Volvió a la mano derecha donde solo cobró una fea voltereta en un parón del animal, voltereta sin más consecuencias. Insistió el torero, con valor, con el utrero más bronco, tratando de sacarle los muletazos después de uno en uno, con la derecha y con la izquierda, pero el negro animal fue desarrollando sentido. Ajustadas bernardinas precedieron a dos pinchazos, dejando después una estocada arriba, sonando el aviso justo cuando doblaba el utrero ( incomprensible). Pitos para el novillo y ovación con saludos para García Pulido.
Otra faena de valor de Cristiano Torres en el sexto
Trapío de toro tuvo el sexto , de toro de los noventa, que se movió bien en los primeros tercios, sobretodo por la lidia de Miguel Ángel Sánchez, que le enseñó muy bien los caminos en banderillas, dónde cumplieron de sobra sus compañeros Rafael González y Manuel De Los Reyes. Pero el utrero no siguió la linde y se mostró protestón en las primeras tandas con la derecha. Por el izquierdo mostró cosas diferentes pero igual de malas, quedándose corto y llevando la cara a la altura del fajín. No fueron malos los naturales por ese lado de Cristiano Torres pero no llegó a levantar la faena. El arrimón no gustó al respetable. Manoletinas de rodillas entre la división del público ( unos jaleaban y otros pitaban). Dejó una gran estocada final. Palmas para el novillo y silencio para Cristiano Torres.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Las Ventas. Segunda de la Feria de Otoño. Novillada con caballos. 13.757 espectadores.
Novillos de Fuente Ymbro. Vacío y sin clase el primero, que nunca se entregó; con clase, humillación y chispa el segundo, que se acabó pronto; bajito de raza el tercero, que se defendió mucho en la cercanía; incierto el cuarto, que no acabó de romper y sacó sentido por el pitón izquierdo; soso el quinto, que desarrolló sentido durante la faena; también incierto el sexto, de juego cambiante y sin romper.
Jorge Molina, de celeste y oro, división tras aviso y silencio tras aviso.
García Pulido, de lila y oro, ovación tras aviso y ovación.
Cristiano Torres, de rosa palo y oro, que hacía su presentación, silencio tras aviso y silencio.
FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO
