Manolo Sánchez es sin duda uno de los toreros con mayor clase que ha dado Valladolid en los últimos lustros, un diestro de corte clásico que enganchó al aficionado ya desde novillero y que dio un recital en una alternativa de lujo allá por septiembre del 92 junto a Roberto Domínguez y Juan Antonio Ruiz “Espartaco”. Un torero al que esa tarde la espada no le dio la espalda, saliendo a hombros tras una tarde de toreo caro.
Prosiguió con una carrera donde consiguió realizar faenas de gran calado pero sin el refrendo de esa regularidad necesaria para aguantar el paso de las temporadas en la parte selecta del escalafón. Manolo Sánchez ha sido un torero de esos que el aficionado siempre esperó, pero la presión de ser figura le atenazó en una carrera que no acabó de explotar como merecía su toreo. Se movió por la parte media del escalafón sin llegar a enlazar esos triunfos consecutivos que necesitaba su temporada para no menguar en festejos.
Los años pasaron y con ellos la oportunidad soñada por un torero que cada año le regalaba al aficionado de su tierra faenas para guardar en la retina como aquella a un toro de El Sierro a comienzos de siglo XXI, una faena de un temple admirable a un toro de gran bondad. Otra de las destacadas tuvo como protagonista a un toro de Atanasio Fernández también en septiembre pero del 2006. Un torero que una vez retirado ha seguido en contacto directo con el mundo del toro, apoderando a varios diestros y acercando lazos con el toro bravo.
Apoderado de Mario Navas y veedor de Roca Rey
Sánchez siempre ha sido un diestro con un gusto exquisito, de ahí que no sea descabellado verlo junto a uno de los novilleros de moda, un Mario Navas, que se ha destapado como uno de esos jóvenes valores a tener muy en cuenta de cara al futuro. Un novillero con un concepto de gran pureza, ese que siempre ha caracterizado a su paisano Manolo Sánchez. Con un concepto de enganchar a los toros y llevarlos detrás de la cadera, Navas busca torear con la cintura y las muñecas, pulseando la embestida del animal para intentar reducir la embestida de los animales.
Pero ahí no queda la cosa, ya que Manolo Sánchez también hace las labores de veedor para la empresa BMF, gestora de cosos como Salamanca, Logroño, San Sebastián o Bilbao. Un campo al que se ha ido adaptando poco a poco y que combina con labores similares para el espada peruano Andrés Roca Rey, torero al que apodera Roberto Domínguez, paisano y padrino de alternativa de Sánchez, como se pueden ver en las siguientes imágenes del programa Tendido Cero de TVE.
Manolo Sánchez en Valladolid (07-09-1992)
Toro de Núñez del Cuvillo
Imágenes Tendido Cero pic.twitter.com/kaesit5b0V
— torosVHS (@TorosVHS) November 24, 2023