Cuando comienza a ‘cocerse’ el guiso de lo que será la temporada 2024, si hay un torero que debería colocarse en los puestos de salida es Fernando Adrián. Por su intachable temporada 2023, con dos puertas grandes de Madrid como epicentro y otras trece salidas a hombros de forma consecutiva, pero sobre todo por la justicia que el toreo siempre ha tenido con los toreros que han dado la cara en la primera plaza del mundo.
La gran mayoría de Ferias estaban hechas cuando Adrián cruzó por dos veces el umbral de la calle de Alcalá, pero se iban sucediendo decenas de sustituciones y sólo algunas de ellas contaron con él al final del verano. También en La Maestranza saltaron sustituciones, pero no se contó con él, y todo a pesar de su impoluto currículum en este ruedo, en el que junto con el doble triunfo madrileño debería contar de cara a un próximo abono hispalense.
La pulcra trayectoria de Fernando Adrián como novillero en La Maestranza, en la que no ha debutado como matador
Ya el 8 de julio de 2010, Fernando Adrián quedó clasificado en las novilladas nocturnas de La Maestranza cortando una oreja aquella tarde en el Baratillo y, veinte días más tarde, paseó otro premio, quedando como segundo nombre del Certamen.
El 26 de junio de la temporada siguiente, tuvo lugar su presentación como novillero con picadores en la Real Maestranza con novillos de la ganadería de Montealto, perdiendo la salida por la Puerta del Príncipe por el mal uso del descabello, dando una vuelta al ruedo en el primero y cortando una oreja al segundo. Se ganó, aquel día un puesto para la novillada de triunfadores que se celebró en este coso el 18 de septiembre. No obstante, no hubo suerte aquel día con el encierro de Los Azores, siendo ovacionado al esfuerzo en su lote.
El 13 de abril del siguiente año, tomó parte en una tercera novillada con picadores en el Arenal, lidiando un encierro de Fuente Ymbro al que volvió a pasearle otra oreja. Y el 6 de septiembre de aquella temporada, regresó al Baratillo con un encierro de Yerbabuena, siendo ovacionado. En la temporada siguiente, en su despedida de novillero con caballos, dejó de nuevo otra impactante imagen a pesar del encierro lidiado aquel 5 de mayo; la siguiente tarde, tomó la alternativa en Ávila.