Hablar de la provincia de Jaén es hacerlo de uno de los puntos de España donde hay censados un mayor número de ganaderías de bravo, una localización donde el número de hierros existentes dan fuste a esta zona tan particular de nuestra piel de toro. Aquí se han ido estableciendo ganaderos a lo largo de varios siglos, teniendo un repunte importante a comienzos del XX. Pero los tiempos cambian, y con el paso de este muchos ganaderos han ido bajando el número de reproductoras, quedando muchas de esas divisas vacías de animales o con un número testimonial de vacas.
Lugares de gran valor ecológico por el gran número de especies que viven bajo su linde. Fincas donde hay sitio para el caballo, el cochino ibérico u otras especies cinegéticas que tienen en esta provincia un lugar ideal para vivir. Explotaciones ganaderas que según el lugar donde estén ubicadas tendrán una orografía u otra, combinando muchas de ellas la cría del animal bravo con amplias zonas de olivar o dehesas donde la bellota se hace notar de forma más que evidente.
“Medianería”, una dehesa de más de 1.000 hectáreas
Una de las más ilustres de la provincia es “Medianería”, una dehesa de más de 1.000 hectáreas situada en el término municipal de Andújar. Allí, la familia Flores Albarrán la puso a la venta, actualizando el precio de ésta el pasado 14 de diciembre. A través de la web Milanuncios se puede ver dicha oferta y acceder a un volumen mayor de información sobre las características de la finca, así como el importante número de animales que habitan en ella. Esta es la descripción:
Se trata de una dehesa joven de 1.360 hectáreas con ganadería mansa de unas 200 nodrizas, ganadería brava con 100 nodrizas, ganadería porcina, tres cotos de caza dónde se hacen ganchos y monterías, actualmente arrendado a asociación de cazadores con caza mayor (venados, gamos, etc.) y caza menor (perdiz, tórtola, palomas). Las instalaciones de la finca son cortijo principal con 10 dormitorios, naves para almacenamiento de piensos y forraje, cuadras, cochineras, etc.
También posee dos viviendas para vaqueros, una vivienda para guarda, tentadero, manga de tratamientos, cercados para manejo de ganado, cercados para engorde de ganado, cercados para cría de ganado, siete pozos de agua, etc. También dispone de aperos, maquinaria y vehículos de trabajo. Finca que obtiene numerosos beneficios por alquileres de cotos, monterías, venta de ganado y subvenciones.
Pese a estar a la venta desde hace algún tiempo, por el momento no hay fumata blanca de cara al cambio de propietario de una finca que está valorada en un precio que ronda los 7 millones de euros. Una cantidad importante, pero que no dista mucho del valor de otras de la zona con unas características similares en las que la existencia de caza mayor y menor le dan un plus de cara a poder conseguir un comprador que sea el relevo de una familia que lleva en estos pagos desde hace un considerable número de años.
La ganadería de Flores Albarrán, un emblema del campo bravo de encaste Santa Coloma
Hay que tener en cuenta que la vacada de los Hdros. De Flores Albarrán está sustentada en el encaste Santa Coloma con reminiscencias de Gamero-Cívico. Un hierro que pasó momentos muy duros debido a problemas sanitarios que afortunadamente ya dejaron atrás. La ganadería está cargada de historia que aún perdura gracias a una familia que se ha desvivido por un tipo de toro diferente al resto.
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Fue en el año 1919 cuando llegaron desde Salamanca a tierras jiennenses Pedro y Francisco Flores Albarrán, buscando una finca donde comenzar su proyecto ganadero. En el año 1925 adquirieron la ganadería que a finales del siglo XVIII había creado don Gil de Flores, y que en 1881 heredaron su viuda e hijos. Así, los nuevos propietarios variaron el hierro y divisa, aumentándola con reses del Marqués de Cúllar de Baza, en 1932 con un semental de Santa Coloma, en 1934 un lote de don Celso Pellón y en 1935 la ganadería de Eizaguirre y Tejerina: con esa mezcla se empezó a cuajar lo que hoy día se conoce como Flores Albarrán.
Durante la guerra fue notablemente reducida y en 1946 adquirió reses oriundas de Samuel Hermanos, de procedencia Gamero Cívico. En 1956 se parte la ganadería, continuando unidos don Daniel y don Pedro, bajo la denominación de “Hdros. De Flores Albarrán”, los cuales adquirieron a doña Ana Carolina Díez Mahou varios sementales y vacas durante años sucesivos. Primero fue el semental puro de Santa Coloma “Guitarrero”, n.º 123, y en 1972 otro del mismo origen, “Venturero”, n.º 71, así como un lote de eralas con el mismo hierro y procedencia, quedando todas las reses de origen Gamero-Cívico absorbidas por la sangre Santa Colomeña (línea Buendía), dejando un origen muy peculiar en el hierro.
Estas son las embestidas de estas vacas, en un tentadero protagonizado hace unos años por el torero sevillano Borja Jiménez:
TENTANDO CON … @BorjaJimenez92 en Flores Albarrán pic.twitter.com/TvP4BVvIF6
— Los Toros de Sevilla 🐃 🇪🇸 (@torosevilla) February 9, 2020
Por último, de los ocho hijos que tuvo Pedro Flores Albarrán, su hermano quedo soltero, y varios de ellos se unieron para llevar juntos un mismo proyecto ganadero, siendo años después Pedro Luis Flores Benayas, quien la dirigió hasta su muerte en 2018.
Por último, compartimos un reportaje que el equipo de Toros para Todos, de Canal Sur, hizo en la ganadería hace unos años: