Daniel Luque, Emilio de Justo y Pablo Aguado hacían el paseíllo, este sábado, en la tercera de abono de la localidad de Santisteban del Puerto, Jaén. Se lidiaba un encierro de Sancho Dávila.
Luque, por encima del descompuesto primero
El primer toro de la tarde, para Daniel Luque, echó las manos por delante, y estuvo muy descompuesto en la embestida durante toda la lidia del sevillano. Aguantó en el inicio de obra Luque las embestidas sin ritmo del animal, y con una soberbia superioridad, metió en el canasto al animal. Dejó un espadazo contrario y paseó oreja.
De Justo se hace con el incierto segundo y pasea oreja
No se pudo estirar De Justo en el saludo capotero al primero de su lote, un animal también incierto de inicio. Muleta en mano, el extremeño dejó buenos instantes de toreo de mano baja por la diestra, después de enseñarle el camino por bellos doblones de inicio. Al natural, dejó dos series componiendo con bella factura. Estocada entera y oreja.
Aguado, una oreja al natural en el tercero
Al tercero lo saludó dispuesto Pablo Aguado, aunque el animal no permitió de inicio el lucimiento. Empujó mucho en varas el de Dávila. Lo toreó muleta en mano al natural a media altura, dejando una buena serie, ya que por la derecha se quedaba muy corto. Detalles torerísimos del sevillano, que lo despenó con una estocada arriba y paseó una oreja.
Luque desoreja al cuarto al natural
El cuarto de la tarde, segundo de Daniel Luque, fue un animal cuidado en todo momento por el de Gerena, al que luego sometió en la obra. Primero con la mano derecha, luego con dos series por la zurda, alargándole el camino, hasta que le sacó todo lo posible. Destacó sobremanera al natural. Luquecinas de cierre, pinchazo, estocada en todo lo alto y doble premio.
De Justo se rompe al natural e indulta al extraordinario quinto de Sancho Dávila
Emilio de Justo indultó al quinto, un toro de clase, transmisión, humillación y bravura. Lo recibió de capa con excelsas verónicas, recibió dos varas en el caballo y desde el principio, la obra la planteó atacando al animal y templando su viaje. Extraordinario animal y extraordinario el toreo al natural del extremeño, que selló una obra de primor. Toro a más, al que se le pidió el perdón de la vida, concedida por el palco.
El poso de Aguado, oreja del flojo sexto
Pablo Aguado cerró la tarde con una oreja ante un flojo ejemplar, sin transmisión, y al que el sevillano dejó momentos de poso y de buen gusto, especialmente con la derecha. Dejó pinchazo hondo y dos descabellos.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Santisteban del Puerto, Jaén. Tercera de abono. Corrida de toros. Más de media entrada.
Toros de Sancho Dávila, indultado el extraordinario quinto.
Daniel Luque, oreja y dos orejas.
Emilio de Justo, oreja y dos orejas y rabo simbólicos.
Pablo Aguado, oreja y oreja.
FOTOGALERÍA: JESÚS DELGADO