A lo largo de la más que centenaria vida del Coso de Mendigorría el Corpus de Toledo ha acartelado a las grandes figuras del escalafón hasta el punto de convertirse en una de las citas más lujosas del año.
Manolete, Luis Miguel Dominguín, Camino, Diego Puerta, Curro Romero, Ponce, José Tomás, El Juli… han trenzado el paseíllo en esta cita marcada en rojo en el calendario taurino mundial.
Este año la empresa Mare Nostrum que dirige Nacho Lloret ha elaborado un cartel de máxima categoría acorde a lo que siempre fue el Corpus.
Tres figuras del toreo en diferentes estados y experiencias de su carrera midiéndose ante la entendida afición toledana con los toros de Juan Pedro Domecq.
Morante vuelve a Toledo tras protagonizar hace dos años una de esas faenas que calan cuando van pasando los tiempos. Ante un serio toro de ante un serio toro de Alcurrucén construyó una faena que nadie veía hasta poner a la plaza en pie. La oración de despedida fue claro síntoma de lo especial de lo vivido. Su bagaje más allá de Toledo no cabe en estas líneas al estar ante un torero de leyenda.
Roca Rey llega arrasando como cada temporada en la plaza y la taquilla y vuelve a la capital imperial tras una actuación de vértigo el año pasado en el que se jugó la vida sin cuentos para lograr el triunfo. El peruano cumplió la máxima de «si no embiste el toro embiste el torero» y logró el doble trofeo a costa de una visita a la enfermería que le impidió salir en volandas. La atmósfera de lo vivido seguro que hará que muchos repitan el jueves.
Cierra el cartel Tomás Rufo que llega tras dejar una gran imagen en Madrid y con la clara misión de rematar en Toledo todo lo mucho y bueno que ha hecho estos últimos años allí. Desde su debut en 2020 con triunfo ha dejado grandes actuaciones con capote y muleta y solo la espada le ha evitado redondear numéricamente tardes de grandísimo nivel.
Un duelo en todo lo alto en la capital manchega con la presencia de tres figuras peleando por el cetro de Toledo.