MADRID

Sobre la hora, Ventura se reconcilia con el rejón de muerte y agiganta su leyenda


sábado 1 junio, 2024

No fue una corrida fácil, pero sí agradecida cuando las cosas se hacían bien y eso, a caballo, suele ser complejo. Sin embargo, Diego Ventura, en una verdadera exhibición, consiguió una puerta grande in extremis, cuando ya el rejón de muerte comenzaba a ser una pesadilla. Todo lo hizo bien el luso andaluz, que amplió su récord y suma ya 19 puertas grandes. Casi nada. También brilló Seguí Galán, que pinchó su puerta grande ante el quinto. De vacío se fue el portugués Rui Fernandes, que tuvo al mejor toro del envío.

20 Diego Ventura
Ventura a hombros de Madrid esta temporada.

No fue una corrida fácil, pero sí agradecida cuando las cosas se hacían bien y eso, a caballo, suele ser complejo. Sin embargo, Diego Ventura, en una verdadera exhibición, consiguió una puerta grande in extremis, cuando ya el rejón de muerte comenzaba a ser una pesadilla. Todo lo hizo bien el luso andaluz, que amplió su récord y suma ya 19 puertas grandes. Casi nada. También brilló Seguí Galán, que pinchó su puerta grande ante el quinto. De vacío se fue el portugués Rui Fernandes, que tuvo al mejor toro del envío de Los Espartales.

Un salto al callejón fue lo más cantado del primero, con fallo a espadas de Rui

Fiel a su cita, el primero de Los Espartales saltó al callejón y lo intentó otras tantas veces antes de que Rui Fernandes pudiera fijarlo con un pinchazo y un rejón de castigo. Sin embargo, tuvo un templado y sostenido galope cuando el portugués consiguió encelarlo, aunque si perdía la distancia, también perdía el toro el interés y buscaba nuevamente los tableros. Más centrado estuvo el toro y el público con «Mistral» y sus piruetas al salir, pero se eternizó con los aceros al final y su entonada faena se fue al traste.

7 Rui Fernandes (1)

Sergio Galán cobra el premio a su decidida apuesta

No fue fácil el segundo, un toro que con querencia a los tableros que Sergio Galán supo aprovechar a su favor, para encelar y desperté el interés del toro en sus monturas. Sobre todo a lomos de «Capricho», con el que asumió riesgos el conquense, pues el toro no tenía ritmo, embestía por oleadas difíciles de templar. Aún así, redujo distancias para mantener la tensión. Igual que lo hizo sobre «Bambino», con el que llegó aún más cerca para batir a pitón contrario, cuando el toro tenía tendencia a recortar, para luego clavar arriba. Faena dispuesta y de apuesta, cerrada con un rejonazo que le valió el trofeo.

Ventura se atasca con el rejón de muerte y pierde un triunfo seguro

Un reto nada fácil resultó el tercero, un toro que, si bien se mostró pronto y fijo de salida, una vez sintió el rejón transformó aquello en reservas y medida, recortando por dentro y renunciando a los galopes cuando se sabía podido. Pero eso aprs Diego Ventura no significa imposibilidad. El jinete supo darle la vuelta a la situación con una demostración de doma contundente a lomos de «Nómada» y «Bronce», recortando distancias y pisando terrenos del toro para provocar y extraer todo lo poco bueno que quedaba en el toro, pero está no es su feria con el acero definitivo y perdió un triunfo rotundo, el que tenía después de ese arriesgado par a dos manos sin cabezada sobre «Bronce». Queda otro.

13 Diego Ventura

Rui Fernandes deja escapar el triunfo con el mejor toro de lo que va de corrida

Otra cosa pareció el cuarto, bueno desde su templada y fija salida, siguendo humillado y con ritmo la montura de Rui, que optó por un único rejón de castigo. El toro tenía un punto de sosería que permitía al cavaleiro lucir su doma sin asumir demasiados riesgos, pero el riesgo era, precisamente, no caer en la frialdad. Ese fue su pecado. Por mucho que quisiera enmendarlo con «H-Quiebro», dejando los palos muy desiguales en los vistosos cambios, pero lució más con las hermosinas. Por eso apostó de nuevo por «Mistral», para alegrar las salidas con sus piruetas, aunque es verdad que con él sí que dejó una buena banderilla ajustada y en todo lo alto tras la batida. Además, no anduvo fino otra vez con el rejón definitivo.

Galán pincha la puerta grande tras una faena de exposición

Tuvo que poner y exponer mucho Galán con el quinto, pues aunque el toro tuvo bondad, le faltó chispa para sumar en la faena. Cierto es que apretó por dentro, pero era el centauro quien tenía qué aportar la emoción en su labor para buscar el trofeo que le diera la puerta grande. Y para eso confió el jinete en «Capote» y «Capricho», con los que llegó a la cara del toro en los quiebros y batidas, y se dejó llegar después en las hermosinas y carreras de costado, siempre esperando y midiendo para salvar el arreón. Clavó reunido Galán, también ese par de cortas a dos manos a lomos de «Óleo», del que salió tropezado, del riesgo que asumió. Mató al segundo intento y eso le privó de cobrar el trofeo que le daba la puerta grande.

10 Sergio Galán

Ventura se inventa el triunfo

Cómo una explosión cayó el rejón de poder a poder, con el toro saliendo de chiqueros, que dejó Ventura al sexto. Iba a por todas para no marcharse de vacío en la feria. Sin embargo, él toro no estaba por la labor, tan falto de fijeza. Aunque eso para Ventura no es obstáculo insalvable. El jinete se apoyó en las querencias, citando siempre a favor de chiqueros en la distancia, para dejar dos quiebros soberanos, esperando la emoesrids, sobre «Lío». A lo los de «Fabuloso» consiguió enganchar una vuelta al ruedo con el toro cosido a la barriga y un par de hermosinas ajustadísimas, aunque esta vez le falló un poco la reunión de los palos. Las tres cortas al violín, cuando el toro ya aportaba menos, le dejaron el triunfo servido, el mismo que ahora si abrazó con un certero y fulminante rejón de muerte.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Las Ventas, Madrid. Vigésima de la Feria de San Isidro. Casi lleno.

Toros de Los Espartales, despuntados para rejones y de buena presencia. Obediente a pesar de su escaso celo, el primero; con ciertas complicaciones, el segundo; con muchos matices en las embestidas el complejo tercero; noble y bueno, el cuarto; muy soso el quinto; noble y con virtudes el buen sexto.

Rui Fernandes: silencio y ovación.

Sergio Galán: oreja y ovación.

Diego Ventura: palmas y dos orejas.

FOTOGALERÍA: EMILIO MÉNDEZ

Fotogaleria Madrid 1 6 2024