Fernando Robleño, Sergio Flores y Gómez del Pilar cerraban, este domingo, la Feria torista de Céret con una corrida del emblemático hierro de José Escolar.
Robleño porfía con un primero sin opciones
Alto y con seriedad fue el animal que partió plaza, un astado al que Robleño le dejó buenas verónicas en su saludo capotero. Fue tres veces al jaco en un tercio de varas donde no acabó de entregarse. Mismo comportamiento tendía en la muleta, porfiando el madrileño en una labor seria pero carente de ligazón. Puso todo sus recursos, pero no pudo conectar con los tendidos debido a la descastada embestida del de Escolar. Lo mejor fue la estocada fulminante que tiró al toro sin puntilla pese a caer esta algo contraria. Silencio.
Sergio Flores pasea premio tras imponerse al encastado segundo
Serio y bien armado fue el segundo de Escolar, un ejemplar complicado de salida y al que se sacó el mexicano a los medios con soltura. No se entregó en el jaco, acometiendo violentamente y sin emplearse. Ya en la muleta el astado abulense sacó carácter y cierto genio, ese que domeñó Sergio en su pañosa. Se arrimó como un león ante un astado exigente por encastado, pero de embestida corta. Anduvo fresco de mente dejando tandas meritorias a derechas. Tras un espadazo arriba paseó una oreja de peso.
Silenciado Gómez del Pilar con el “marrajo” segundo que hirió a José Mora
El segundo de la tarde fue un animal muy complicado de Escolar, un toro que ya de salida evidenció que iba a tener poco recorrido. Un astado que acudió un total de tres veces al jaco, no empleándose en ninguna de las tres varas. Acortó viaje apretando mucho en banderillas, fruto de esas complicaciones fue la cornada que le infirió a José Mora, teniendo que pasar este rápidamente a la enfermería donde fue estabilizado antes de ser trasladado al hospital más cercano. No tuvo ni un pase, un astado orientado y muy peligroso con el que el toledano realizó una faena andándole por la cara. Tras una buena estocada sería silenciado.
Un pinchazo resta premio a Robleño con el exigente, pero de corto viaje cuarto
Se entregó de salida el animal que hizo cuarto, un toro con movilidad encastada que no empujó de verdad en los tres puyazos que tomó. Tuvo exigencia y temperamento el de Escolar, un ejemplar con el que estuvo francamente bien el madrileño por ambos pitones. El animal abulense, de corto recorrido, exigió poderío y firmeza de plantas a un diestro que estuvo por encima de su oponente. Pero la espada emborronó todo escuchando un aviso antes de ser silenciado.
Sergio Flores se topa con un parado y deslucido quinto
Serio y largo fue el segundo del lote del mexicano, un ejemplar al que lanceó a la verónica lidiándolo hasta llevarlo a los medios. Tres puyazos recibió sin emplearse en ninguno de ellos antes de llegar a las telas. No quiso tirar hacia adelante, parándose en la muleta y soltando la cara. Le atacó en meritorias tandas a derechas en un trasteo ayuno de lucimiento. Tras tres pinchazos fue silenciado.
Una “alimaña” de Escolar no da opciones a Gómez del Pilar
El sexto fue un animal que nunca quiso irse a los vuelos, un ejemplar al que lidió con solvencia el toledano. Tres puyazos recibió un ejemplar que se había estropeado los pitones en los corrales. Sin pena ni gloria pasó por el jaco antes de orientarse en los capotes. Muy duro el animal acortando siempre los terrenos y apretando hacia los adentros. Acertó Gómez del Pilar en ni ponerse delante al venirse muy por dentro ni no hacer coso de los toques. Metió la mano al segundo intento con habilidad antes de dejar dos descabellos, siendo finalmente abroncado.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Céret (Francia). Última de Feria. Corrida de toros. Lleno en los tendidos.
Toros de José Escolar.
Fernando Robleño, silencio y silencio tras aviso
Sergio Flores, oreja y silencio
Gómez del Pilar, silencio y silencio
INCIDENCIAS: José Mora perdió pie y una vez en el suelo el astado le infirió una cornada perforando la vejiga y siendo rasladado al hospital de Perpiñán para ser operado.
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FOTOGALERÍA: MURIEL HAAZ