Adiel Armando Bolio/Foto: Efrén González
Bajo un fuerte calor y algunas refrescantes ráfagas de viento se dio la novillada que montó la empresa «Viva el Toro» en el Cortijo «Las Fuentes», que registró una buena entrada y en la que resultó triunfador, dando una grata sorpresa, el debutante con picadores neoleonés Lázaro Rodríguez al cortar en el último novillo, la única oreja de la función. Sus demás alternantes no dijeron nada con su quehacer.
El festejo comenzó una hora tarde de lo anunciado, además de los 35 minutos que tardaron en echar al ruedo el primer astado.
Se lidiaron seis novillos bien presentados de la afamada dehesa zacatecana de José Julián Llaguno, siendo los tres últimos los mejores del encierro.
Luego de 35 minutos de tardanza para que saliera el primer astado por problemas en las puertas del camión que transportó el ganado, por fin saltó a la arena para que el mexiqueño Mirafuentes de Anda veroniqueara con torería. Con la muleta anduvo deseoso por agradar lidiando a un astado nada fácil. Sin embargo, sus mejores momentos los logró por naturales. Labor de aliño para matar de pinchazo y estocada honda, delantera y caída para escuchar palmas en el tercio.
Al segundo, el zacatecano Eduardo Castro nada le hizo con el capote. A un ejemplar parado, rajado y aquerenciado en toriles, lo que le hizo con la muleta no tuvo mayor relevancia pues careció de oficio, técnica y recursos para lidiarlo. Abrevió y acabó de pinchazo y estocada para recibir palmitas.
En el tercero, el también zacatecano Emmanuel Cuenca bregó con empeño. Su labor de muleta tuvo mérito por ambos lados a causa de lo complicado del burel. Destacó lo que hizo por naturales cuando le aguantó. Lo demás fue sobre piernas. Ayudados por alto con quietud para matar de estocada trasera y muy baja, siendo aplaudido.
El también zacatecano Juan Francisco «Papo» al cuarto lo lanceó a la verónica con voluntad. Su quehacer muleteril, luego de empezar doblándose toreramente, al débil burel, pero de buen estilo, por momentos le tomaba la distancia para lograr buenos pases derechistas. Evidenció verdor todavía, pero le puso entusiasmo. Por naturales no hubo acoplamiento. Lástima, se le fue el que hasta este momento era el mejor astado. Se puso pesado con la espada, no sabe entrar a matar. Acabó como pudo y le salió barato al recibir tan sólo un aviso y algunas palmas de aliento.
Al quinto, el mexiquense Ángel García lo veroniqueó con esmero. Su labor de muleta comenzó vaciando por alto para después estar empeñoso y torero por ambos lados, pero sin encontrar la distancia justa en cada pase. Tuvo pasajes buenos, pero sueltos, principalmente por el izquierdo. También desacertó con la espada y le sonaron un aviso con algunas palmas.
Y en el que cerró el festejo, «Matajacas», el debutante neoleonés con caballos, Lázaro Rodríguez, lanceó con voluntad a la verónica sin ajustarse mucho. Con la sarga se le vio desenvuelto y sereno. Sabe correr la mano con arte, temple y suavidad por ambos pitones, sobre todo, por el derecho al buen astado. Manoletinas, además de ayudados por alto para abrochar la faena y matar de estocada para obtener una merecida oreja.
FICHA
LUGAR: Valladolid (Jesús María), Aguascalientes.
EVENTO: Novillada de la empresa ¡Viva el toro!.
PLAZA: Cortijo “Las Fuentes”. ENTRADA: Buena, en tarde calurosa y con ráfagas de viento fresco.
GANADO: Se lidiaron seis novillos bien presentados de la afamada dehesa zacatecana de José Julián Llaguno, siendo los tres últimos los mejores del encierro.
CARTEL: Mirafuentes de Anda: al tercio. Eduardo Castro: palmas. Emmanuel Cuenca: palmas. Juan Francisco “Papo”: palmas tras un aviso. Ángel García: palmas tras un aviso. Lázaro Rodríguez, quien debutó con caballos: una oreja.