Ya va teniendo una edad, es verdad, pero no ha pasado ni uno de ellos dejando indiferente a nadie. Y las últimas cuatro décadas ha llevado las riendas de una plaza de toros tan antigua como la civilización moderna. Simón Casas -tiempo ha tenido también para ello- ha convertido al Coliseo en la plaza más importante de Francia. «En mi país no se confirmaban las anternativas, como sucede en todos los países de tradición taurina», explica el productor galo, «y fui yo quien implantó la costumbre, que se ha arraigado tanto que ya sería impensable no confirmar en este coso». Y eso, como sucede en todos los demás países, lo convierte en el coso más importante de su zona.
Pero no ha sido sólo ese el secreto de Simón con esta plaza, sino dejarse llevar por la imaginación a la hora de confeccionar los carteles, como él mismo recenoce. «Llevo cuarenta años siendo empresario de Nimes, lo que implica haber estado con gobiernos de todos los colores y matices, y con todos he logrado trabajar en armonía», argumenta orgulloso Simón. «Todos me han permitido crear carteles innovadores, casi imposibles en otras plazas, creando una idiosincrasia propia para el Coliseo, dotándolo de personalidad propia», que es una característica con la que cuentan todas las plazas francesas: sabes el tipo de toro que sale, la clase de público que acude, los gustos de su afición. «Cuando yo llegué, no existía la Feria de la Vendimia, y fue un invento mío, que no comprendí por qué no podía haber una feria en Pentecostés y otra en septiembre. Aposté por traer aquí lo que entonces fue un auténtico acontecimiento, que fue la alternativa de Rafael Camino y Miguel Báez ‘Litri’ hijo, otorgadas ambas por los respectivos padres. Por supuesto, fue un evento global, que convirtió Nimes en el centro del mundo. Ahí nació una feria que siempre he mimado en su confección», narra un Simón verdaderamente orgulloso de su creación.
Y ese mimo se nota en la confección de la Feria de la Vendimia de este año, que tiene alicientes que hoimenajean a la tauromaquia francesa «no sólo desde el festejo mixto de mañana, día 14, en la matinal, con una figura a caballo como Lea Vicens, otra a pie, como Sebastián Castella, y un torero emergente que confirma doctorado, como Clemente, sino en el global de un ciclo diseñado con mucho sentido», explica el productor. Y no le falta razón. Las alternativas o confirmaciones han sido siempre una seña de identidad de Nimes, y en esta ocasión confirmará el ya mentado Clemente, pero también «se doctorará otro torero francés, como Lalo de María, en el festejo que abre la feria, de manos del que más triunfos ha logrado entre mis paisanos, con es Sebastián Castella. Pero es que, además, estarán todas las figuras en a penas un fin de semana», anuncia.
Hay que pararse, como es natural, en la encerrona que protagonizará mañana Daniel Luque con toros de La Quinta, que es «uno de esos acontecimientos que siempre me ha gustado programar en el Coliseo», enfatiza el empresario francés. «Daniel es un torero que no sólo tomó la alternativa aquí, sino que es, probablemente, el torero más querido en la actualidad por el público francés, donde ha cuajado actuaciones formidables, y no me cabe ninguna duda de que esa apuesta, con los toros de La Quinta, va a ser todo un acontecimiento que también tendrá lugar en el Coliseo de Nimes». Como aquella mañana de José Tomás que acabó con una señora gritando desde el tendido «Mercì, monsieur Casas», mientras levantaba al cielo una copa de plástico llena de champán. Toda la plaza ovacionó la ocurrencia en señal de aprobación.
Por último, hay que referirse por obligación al adiós de uno de los toreros más queridos en esta plaza en toda su historia, como es el maestro Pablo Hermoso de Mendoza. «Aquí se convirtió en el primer rejoneador que indultaba un toro y aquí ha dejado algunas no, muchas de sus obras cumbre a lo largo de su carrera», recuerdo nostálgico un Simón que ya ve cerca el comienzo de la feria. «Cualquiera que tenga sensibilidad artística debe valorar a un torero que dirá adiós el domingo a esta plaza, con todo el dolor de nuestro corazón». Motivos no faltan para asistir a la feria.