Con la temporada avanzando sin solución de continuidad hacia el final de la misma, son varias las empresas que se echaron a la espalda el petate de la fiesta para anunciar festejos mayores y menores con la presencia de hierros ilustres y actuantes de interés para el aficionado. Fuera de ferias de segunda categoría o abonos en plazas de primera como Sevilla, Madrid, Valencia o Zaragoza hay un ramillete de cosos de tercera categoría que cierran carteles mirando hacia el futuro.
Este es el caso de la localidad conquense de Motilla del Palancar, una coqueta plaza que el próximo sábado 12 de octubre abre sus puertas para anunciar una novillada picada con el hierro sevillano de Julio de la Puerta. Se trata de una vacada que pasa por un momento dulce como atestiguan los resultados de los festejos lidiados en los últimos años. Un hierro gestionado por una familia que se desvive por el toro bravo, ese que lleva en su casa desde 1974, año en el que D. Julio de la Puerta y Castro adquiere la vacada de ‘Solís de Casablanca’.
Una ganadería compuesta por dos ramas, una procedente de la sangre Parladé (encaste Domecq), y otra de origen Veragua. Un hierro con el que están anunciados el sevillano Uceda Vargas y los salmantinos Marco Pérez y Cristián González, tres novilleros de un concepto muy marcado, esos que ya han dado sobrados motivos para contar con ellos tanto en esta temporada como en las venideras. Se trata de un festejo organizado por la empresa Ganados Belinchón S.L. junto al ayuntamiento de la localidad manchega.
Novillada que dará comienzo a las cinco en punto de la tarde, esa que servirá para la presentación de Marco Pérez en la provincia de Cuenca, sumando este su cuadragésimo festejo en este 2024. Una temporada donde ha pisado plazas de entidad junto a otras menores donde ha compartido paseíllo junto a figuras del toreo y novilleros de su escalafón, dejando para 2025 su presentación con el castoreño en plazas tan importantes como Sevilla, Madrid o Valencia, entre otras.
Un foco que parece puesto en este joven salmantino, no pudieron olvidar a sus dos compañeros de cartel, esos que no quieren quedarse en simples convidados de piedra y dar un golpe sobre la mesa en uno de los últimos festejos de la temporada. Una tarde donde la competencia está servida entre tres novilleros que sueñan con poder ocupar un puesto de honor en los carteles de mayor fuste del escalafón una vez consigan asentarse -en un futuro- como matadores de toros
CARTEL DEL FESTEJO