Sebastián Castella, José María Manzanares y Alejandro Talavante hacían el paseíllo, este 6 de octubre, en la tercera de la Feria del Pilar, en la que se lidiaba un encierro de Álvaro Núñez.
Castella se justifica ante el peligro del primero
Arrancó la tercera de la feria del Pilar, primera en fiestas, con un lleno aparente en los tendidos, menos en el palco de prensa que solo estaba representando a los medios un servidor, y sonó el himno nacional como es costumbre desde el confinamiento, en esta plaza. Tras ello, saltó al ruedo «Recoldito» número 20, nacido en marzo del veinte, y con 603 kilos de peso. De pelo colorado y ojo de perdiz, el de la ganadería de Álvaro Núñez, regordío y con poca cara, fue recibido por Sebastián Castella con una larga cambiada en el tercio seguida de un ramillete de verónicas. Se armó el lío cuando asomaron los picadores en el ruedo arrancándose el de Álvaro Núñez y que, gracias a Luis Blázquez, tercero de Castella, no hubo percance al derribar a uno de los jamelgos. Liviano castigo sufrió el toro al que quiso cambiar el matador con dos simulacros de entrada al caballo, aunque el toro sangró más que algunos de los toros de ayer. Bien el presidente en este caso, usía que no es el de ayer; veremos. Se escapó Rafael Viotti del serio percance al ser derribado en el tercer par, excelente par por cierto, gracias al quite de Luis Cebadera, que estaba bien colocado. Saludó Viotti. Y comenzó faena Castella a un reservón toro, que ya se había estirado y parecía un tren. Corto, mirón y cambiante en el recorrido, lo fue encelando el torero francés por el derecho, tragando una barbaridad. Igual de malo, o peor fue la embestida por el lado izquierdo. Se la jugó Sebastián Castella sin trampa ante el peligro más que evidente del de Álvaro Núñez. De dos pinchazos y estocada corta finiquitó a este primero. Pitos para el toro y silencio para Sebastián Castella.
Oreja a la cadencia y el empaque de Manzanares en el segundo
106 kilos menos pesó el segundo, animal de buena hechura, «Zalamero» de nombre, número 34, y nacido en agosto del 19. Otro animal de pelo colorado que echó las manos por delante en el recibo de Manzanares. Tras una costalada siendo llevado al caballo, se empleó el toro en el peto, sin recargar pero con fijeza. Acudió con alegría en el segundo encuentro. Dos excelentes pares de Juan José Trujillo, en el segundo se jugó la chaquetilla, precedieron el inicio de Manzanares sin preámbulos, toreando ya por el lado derecho con mucha cadencia. Suavidad, cadencia y temple aplicó el torero alicantino a la embestida de un toro de gran clase pero poquito fuelle. En la tercera tanda de derechazos se sucedieron excelentes muletazos. También fue buena la serie al natural con el animal más reacio a seguir el engaño hasta el final. Gran serie con la mano derecha antes de irse a por el acero con la plaza entregada al diestro de Alicante. Dejó media tendida de efecto rápido y afloró la petición de trofeo concedida por la presidencia, habiendo ovación para el buen toro de Álvaro Núñez.
Talavante pasea una oreja tras una faena de gusto
Tenía mucho trapío «Blanquito» número 41, colorado y con 537 kilos, nacido en noviembre del 19, que pareció arrastrar los cuartos traseros en el recibo de Alejandro Talavante y con el que demostró buena preparación física Álvaro Montes sacando del caballo al toro con el capote enrollado. Quite a la verónica del extremeño al ralentí y cambio de tercio con el toro empujando con fijeza. Picó bien Miguel Ángel Muñoz. Excelente tercio de banderillas por parte de Javier Ambel que saludó. Seguía encampanado el toro cuando se fue a por él Alejandro, perdiendo las manos el animal en el primer muletazo. Buena primera tanda de derechazos de Talavante que hizo hacer sonar «Nerva» y a la que sucedió otra serie al natural con pases muy despaciosos y largos. Otro gran toro de Álvaro Núñez al que le faltó un poquito de fuerza, pero ya daba igual, pues el público estaba metido en la faena. Le dio tiempo entre series Talavante y lo agradeció el toro, que continuaba embistiendo como un carretón. Desplante de Alejandro antes de irse a por la espada y rotunda ovación para el diestro extremeño. Manoletinas de frente cerradas con un desdén de cartel y media estocada tendida algo suelta que bastó. Sacó casta el de Álvaro Núñez siendo ovacionado en su solemne muerte. La petición fue mayoritaria y se concedió el trofeo. Ovación para otro buen toro de Álvaro Núñez.
Dos orejas para Sebastián Castella en una obra de técnica y mucho temple
Se frenó «Campanito» el número 18, cuarto de la tarde y de 523 kilos de peso, en el capote de Sebastián Castella. Lo vio venir el monosabio a galope tendido (galope del monosabio también) cuando asomaron los caballos de picar en el ruedo pero lo cortaron y se enderezó la lidia. Breve fue el tercio de picar en la que se atisbó fijeza en el toro. A José Chacón le persiguió el toro hasta el burladero sin que asomase un capote para cortar. Por dos veces se lució Chacón que saludó, y le quitó el toro a tiempo Alejandro Talavante. Brindó Sebastián Castella al pueblo y comenzó la faena con pases cambiados por la espalda y adornándose con desdenes y trincherillas que pusieron la plaza en pie. Buena serie de derechazos, aunque de poco ajuste, y la música sonando. Bajó el tono de la faena, ya que el toro, aunque noble, no tenía la clase de los dos anteriores, y que Castella seguía buscando los toques justos y la distancia, pero después de una buena serie de naturales, surgieron dos redondas de derechazos. La última en las cercanías del toro, demostró la técnica y el oficio del torero francés, además de mucho valor. Un circular completo y un derechazo, pusieron de nuevo la plaza en ebullición. Manoletinas muy ceñidas y un natural eterno para cerrar faena. Sonó el aviso mientras doblaba el toro (qué necesidad) tras enterrar Castella todo el acero en lo alto y cayeron las dos orejas. Sí se saca el pañuelo por reglamento también por petición popular. Ovación para otro buen toro de Álvaro Núñez que fue a más.
A Manzanares se le acaba el toro cuando más (se) gustaba
También tenía trapío «Ponderoso», que barbeó tablas encarándose con el público. Luego lo toreó Manzanares a placer a la verónica. En número 18 lucia en el costillar este negro bragado meano y axiblanco de capa, nacido en noviembre del 18 y con 503 kilos de peso. Humilló y se dejó pegar en varas aunque perdió la vertical al salir del segundo encuentro. Hizo bien la suerte de picar Óscar Bernal y banderilleó mejor Diego Vicente, que cayó a merced del toro al querer cerrarlo a cuerpo limpio, afortunadamente sin que el animal lo hiriera. Cadencia y temple de nuevo por parte de Manzanares, ya que el toro no tenía fuerza. Lo fue afianzando el torero que se iba gustando cada vez más con la mano derecha. Pero al toro se le fue a acabando la gasolina cuando se la echó a la zurda el torero de Alicante. Insistió José María en la ardua labor por agradar, aguantando incluso parones del cornúpeta, pero fue inútil. Pinchazo y estocada de efecto rápido. Silencio para el toro y ovación para el torero alicantino.
Talavante abrevia ante «las teclas» del sexto
Nacido en octubre del 19, número 38 y de 498 kilos de peso, embistió a la raya de picar durante unos metros mientras sonaba la jota. Echó las manos por delante este sexto, de nombre “Centello”, que también lució el pelo colorado y la divisa de Álvaro Núñez. Mostró fijeza en varas el toro yéndose aplaudido el picador Manuel Cid. Brindis de Talavante al público maño y comienzo de faena por bajo para ponerse al natural de inmediato. Se lo sacó a los medios y ahí se puso el extremeño también a zurdas, pero cuando apretó al burel este se vino al suelo. Luego empezó a defenderse con mal estilo. Luego llegó una colada por ese pitón y el torero cambió a la diestra, por donde también se le vino el toro al muslo. No sé achicó el extremeño que templó al toro a diestras. Al final abrevió el torero ante las teclas del de Álvaro Núñez, tras una natural en el que el toro se revolvió buscando los machos de la taleguilla. Estocada baja y toro rodado, pitado en el arrastre. Silencio para Alejandro Talavante.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de La Misericordia, Zaragoza. Tercera de la Feria del Pilar. Corrida de toros. Casi lleno
Toros de Álvaro Núñez. Corto, mirón, probón y con guasa el primero; De gran clase el segundo; De gran clase el tercero; Noble y a más el cuarto; Flojo y a menos el quinto; Flojo de viaje corto y orientado el sexto.
Sebastián Castella, silencio y dos orejas
José María Manzanares, oreja y silencio
Alejandro Talavante, oreja y silencio