Rui Fernandes, Diego Ventura y Leonardo trenzaban, en la tarde de este 22 de julio, el paseíllo en el Coso de Cuatro Caminos de Santander dentro de la primera de la Feria de Santiago, un serial reducido esta temporada y que se abría con un encierro de Los Espartales.
Rui Fernandes, ovacionado con el primero de Los Espartales
Bajo pero serio era el primero de la tarde, un animal al que Rui Fernandes marró con los rejones de castigo. No estuvo acertado el caballero luso. El animal tuvo calidad y dejó momentos de toreo despacioso Fernandes, pero sin terminar de conectar con el tendido norteño. Con El Dorado dejó buenos momentos de toreo de frente en el epílogo de la faena, dejando un par a dos manos y matando bien. Fue ovacionado.
El mal acero evita premio para Ventura ante el segundo
No pudo completar la portagayola que pretendía ante el segundo Diego Ventura, un animal que salió embalado y que trastocó los planes del rejoneador cigarrero con su caballo Campina. Dejó momentos muy templados a lomos de Velásquez, un animal al que embebió en la grupa. Lío fue el siguiente actor de la escena, que llevó cosido a su pelaje al animal, dejando Ventura varios quiebros de infarto. Lo peor llegó, tras las cortas, con el rejonazo final, ya que pinchó en varias ocasiones y eso evitó el premio.
El buen toreo de Leonardo ante el tercero, lastrado por un pinchazo
Fue ovacionado Leonardo con el tercero del festejo, un animal al que aprovechó el brío que tenía de salida para torearlo en redondo y llegar así al tendido. Con estrellas de su cuadra como Calimotxo o Sol, Leonardo toreó de costado y llevó embebido en sus caballos al de Los Espartales. Espectacular el final de faena, a lomos de Xarope, con el que incluso se desplantó ante el animal de Iniesta, pero el pinchazo enfrió la petición final. Tras matarlo de un segundo rejonazo, fue ovacionado.
Un Fernandes firme pero sin terminar de conectar es ovacionado también ante el cuarto
De nuevo saludó una ovación Fernandes frente al cuarto de la corrida, un animal que manseó en algunos momentos de la faena y ante el que el rejoneador luso se mantuvo firme, pero sin terminar de conectar. A lomos de Chanel dejó buenos momentos de toreo de frente y piruetas posteriores en el final de faena. Ya con el animal totalmente aplomado, mató de pinchazo y rejonazo.
Ventura sella una gran obra al quinto, al que le corta las dos orejas
Las dos orejas le cortó Diego Ventura al cuarto, un animal con el que bordó el toreo a lomos de Nazarí, uno de sus caballos estrella. Bravo fue el toro durante su lidia: con codicia, con enclasada nobleza y queriendo siempre perseguir los cites del caballero cigarrero. Y eso lo aprovechó Ventura con el citado jaco y con Bronce, otro de los baluartes de su cuadra. Aunque el animal en los primeros tercios parecía que la lidia no iba con él, cuando sintió el hierro colaboró. Con Bronce dejó un par sin cabezada, finalizando con Guadiana la obra, antes de matar de un rejonazo entero y pasear el doble premio.
Leonardo solventa con oficio las complicaciones del sexto
En el sexto, Leonardo dio fe del gran momento que atraviesa ante otro animal de Los Espartales con cierta casta ejemplificada en el motor que poseía. Eso tuvo un punto malo: la mansedumbre que evidenció. Leonardo tuvo que solventar con oficio todas esas complicaciones, destacando a lomos de Artista, con el que dejó bellos detalles. Tras matarlo de rejonazo entero, el toro no cayó, y esa tardanza enfrió los tendidos, y junto con el uso del descabello hizo que todo quedase en una sonora ovación.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Cuatro Caminos, Santander. Primera de Feria. Corrida de rejones. Tres cuartos de entrada del aforo permitido.
Toros de Los Espartales.
Rui Fernandes, ovación y ovación.
Diego Ventura, ovación y dos orejas.
Leonardo Hernández, ovación y ovación.