Otro de los nombres propios de este 2024 ha sido el de Tomás Rufo, espada que ha puntuado en una gran parte de las plazas de primera donde se anunció. Plazas de gran importancia como Madrid, Pamplona o Zaragoza conectaron rápidamente con un espada que ha dado un paso más en su carrera. Pero también en Sevilla pudo cortar orejas, no así en otras plazas donde el ganado imposibilitó el triunfo.
20 han sido las corridas de toros de esta campaña, todas ellas con el denominador común de la calidad. Bien es verdad que Tomás ya está asentado en las ferias, pero aspira a poder ocupar los puestos más selectos de un escalafón que debe ir regenerándose poco a poco.
Para resumir su campaña de 2024 nos basamos en el escalafón que este medio tiene a disposición de los aficionados, un lugar donde podrá encontrar toda la información que necesite a golpe de ratón. Pero queremos ir más allá, diseccionando tarde a tarde la temporada de un espada que ha mantenido una importante regularidad durante la campaña.
Castellón y Navalmoral de la Mata, dos tardes triunfales para abrir boca
Los días 8 y 17 de marzo sirvieron para dar por iniciada la campaña 2024 a este lado del charco, dos cosos donde el diestro toledano estuvo arropado por espadas tan importantes como José María Manzanares, Sebastián Castella, Emilio de Justo y Andrés Roca Rey. Una serie de festejos donde la materia prima corrió a cargo de los hierros de Juan Pedro Domecq y Alcurrucén. Tres orejas pasearía en la capital de la Plana en una tarde donde destacó su labor al tercero del festejo, cortando uno a cada ejemplar que le cupo en suerte en el festejo celebrado en la localidad cacereña. Así lo narramos:
Tomás Rufo dejó una seria y entregada actuación a un buen tercero al que le cortó las dos orejas. Ya de capote, el toledano dejó su impronta: toreo embebido en las telas, despacioso, con verónicas a ralentí. Y quitó también por verónicas a pies juntos de muchísimo calado. Muleta en mano, se dejó llegar con valor al de Juan Pedro, al que cuajó por ambos lados primero de hinojos y luego erguido; hubo series rotundas, que calaron en la afición castellonense, intentando torear muy despacio. La estocada final puso en sus manos el doble premio que le permitía salir en hombros en su paso por Castellón.
Sevilla y su doble cita en abril
Por el mes de abril volvería a la Real Maestranza de Caballería de Sevilla tras el triunfo de 2023, un año donde consiguió triunfos de gran calado en plazas de gran envergadura. El 17 de abril rozaría la oreja ante un encastado Jandilla, un animal al que imantó en su muleta el diestro de Pepino. El manso sexto no le daría opción alguna de lucimiento, mostrándose este por encima del astado propiedad de Borja Domecq.
Dos días después volvería para anunciarse con los astados de Alcurrucén, casa ganadera que conoce a la perfección. El toledano se iría de vacío tras pechar con dos astados de deslucido comportamiento, dos ejemplares que no levantaron del tedio a una Maestranza algo desconectada en una tarde que nunca llegó a tomar vuelo.
Madrid y su primera parada en San Isidro
Y tras Sevilla llegó su cita con la afición capitalina, una tarde donde se anunció con una de los hierros más importantes del campo bravo junto a Sebastián Castella y José María Manzanares. El toledano pasea una oreja de peso en un variado encierro de Victoriano del Río, dejando este momentos de importancia con el primero de su lote , ejemplar con el que se mostró muy dispuesto, recibiendo incluso una fea voltereta durante su labor muleteril.
Serio por delante y en su expresión era el tercero de Victoriano del Río, que peleó empujando en las dos varas. Gran tercio de banderillas el protagonizado por Fernando Sánchez y Sergio Blasco, que saludaron una ovación. Confió Tomás Rufo en la condición del toro y tras el brindis, se echó de hinojos en el tercio para citar de largo pese al viento en una primera tanda en la que hubo exposición y mucho valor. Sobre la diestra, dejó el toledano series templadas ante la embestida con calidad del animal, que llegaba arriba, pero estaba muy justito. Cuando cambió al izquierdo, fue prendido y cayó de manera muy fea en el remate del natural, pero volvió a la cara del animal sin aparentes consecuencias, tirando de vergüenza torera. Más firme si cabe estuvo por el pitón izquierdo, donde dejó naturales de bella factura ante un animal ya más parado, uno a uno, sobresaliendo uno que duró una eternidad. Con la tizona, se tiró de verdad para dejar un pinchazo hondo que fue suficiente.
Resumen del festejo de #SanIsidro en @LasVentas
➡️ Tarde importante de Tomás Rufo que corta una oreja
➡️ Buena faena de Manzanares al segundo de la tarde y roza la oreja
➡️ Castella muy por encima de su lote, sin opciones de lucimiento #OneToroTV pic.twitter.com/i0qgkAqMYB
— OneToroTV (@OneToroTV) May 16, 2024
Tomás Rufo conquista su primera Puerta de los Cónsules
Una oreja a cada astado de Alcurrucén que le cupo en suerte paseó en Talavera de la Reina antes de poner rumbo a Nimes, coso donde dejaría una de las tardes de su temporada tras cortar tres orejas a toros de Victoriano del Río. El toledano dejó patente su concepto con dos trasteos de enorme calado en los tendidos, esos que se entregaron en todo momento al toreo de un espada que venía repleto de moral tras su paso por las Ventas.
Fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre el tercero, número 55, de agosto de 2019, de 523 kilos, un toro negro y bajo, con buenas hechuras, frío de salida. Lo saludó por delantales Rufo, quedándose luego encelado en las dos varas el animal., Quitó por chicuelinas Castella. Comenzó por genuflexos la obra Rufo, ante un toro importante, con prontitud y que empujó por abajo por los dos pitones. Las primeras tandas por la mano derecha hubo muletazos muy por abajo y profundos del toledano. Se relajó el torero al natural, en un toreo en redondo y también de mano baja. Cuando el toro perdió un poco fuelle, acortó distancias por luquecinas. La plaza en pie. Dejó un gran espadazo fulminante y paseó dos orejas y pañuelo azul para el astado.
Número 154 era el sexto, castaño nacido en octubre de 2019, al que saludó con una larga afarolada de rodillas. Buen tercio de puyas, e inicio firme de la faena ante un toro con fijeza y buen viaje, pero le faltaba clase y humillación al animal. Brusco el viaje del toro, al que Rufo le puso entrega por ambos lados. Se lució en la distancia corta en la parte final, para intentar la conexión con los tendidos. Manoletinas, pinchazo, espadazo entero y fulminante y oreja.
Madrid y su cierre de San Isidro: máxima entrega ante un nulo lote
No tuvo suerte en su segunda comparecencia isidril, dos toros del Puerto de San Lorenzo que no dieron opciones a un espada que fue todo entrega. No tuvo opciones con un tercero vacío de casta, siendo ovacionada su apuesta con el manso sexto. Esta fue una labor que llegó más a los tendidos por la condición de un ejemplar al que metió por momentos en la pañosa un diestro que dejó nuevamente patente su momento.
No dio tampoco opciones el sexto de la tarde, un animal bajo de raza y huidizo que no dio opciones a un torero que fue todo entrega. Se puso rodilla en tierra el de Pepino para dejar una tanda donde llevó largo a un animal que embistió con emotividad. Le atacó desde el principio a un astado al que nunca dejó irse, de lo contrario se iba a tablas. Destacó una tanda al natural ya muy metido en tablas en las que el manchego buscó desenmuñecar rápido al animal para quedarse colocado de cara al siguiente. Apuntó el animal, pero le pudo su mansedumbre, algo que Rufo aprovechó para quedarse en el sitio y ligar los pases sin sucesión de continuidad. No tuvo maldad el animal, pero su condición no ayudó a ver una faena compacta. Se le fue la espada siendo finalmente ovacionado tras una petición de oreja que no fue mayoritaria.
[🎥 ] En vídeo, de la mano de @OneToroTV, revive los mejores momentos de la duodécima cita de #SanIsidro2024 en #LasVentas.
💥OREJA para Talavante en su primero; saludos para Juan Ortega y Tomás Rufo.
— Plaza de Las Ventas (@LasVentas) May 23, 2024
Su paso por dos cosos importantes de segunda categoría: Toledo y Alicante
Dos orejas pasearía de un astado de Juan Pedro Domecq en la tradicional corrida del Corpus de Toledo, un festejo donde se anunciaría junto a Morante de la Puebla y Roca Rey el 30 de mayo. Una tarde de gran toreo donde sus compañeros de terna también sacaron a relucir sus virtudes con un encierro noble y manejable del hierro sevillano. Días más tarde trenzaría el paseíllo en el coso alicantino, plaza donde realizó una de las faenas más rotundas del serial a un toro de Daniel Ruiz, siendo el único espada que cortó dos orejas a un único astado.
Pamplona y su cita con la Feria del Toro
Tras dar la cara en Sevilla, pasear oreja en Madrid y salir por la puerta de los Cónsules en Nimes, Pamplona era el siguiente puerto de montaña de una interesante temporada. Rufo se anunció con Perera y Roca Rey en una plaza donde Fuente Ymbro tiene un enorme cartel, hierro por el que apostaron tres de los toreros más mandones del escalafón.
Ese “camino” de Vicente Fernández lo tenía bien claro Rufo ante el “Manirroto” tercero, que ya se entregó en varas y que, aunque con poca fuerza, hizo augurar una buena condición. Tras el tercio de banderillas, se echó de hinojos Tomás Rufo para iniciar la obra, conectando con el tendido. Con una gran profundidad toreó de muleta el toledano en las primeras tandas por ambos lados al animal; obra de compromiso del manchego, despacioso en su trazo ante la brava condición de su oponente, al que intentó embeber en redondo especialmente al natural, por donde la obra alcanzó grandes cotas. Los remates de serie también tuvieron garbo, y cuando el animal se vino a menos, atacó en cercanías Tomás, antes de dejar una estocada un punto baja pero efectiva y pasear las dos orejas. No pudo redondear más premios ante el deslucido y desclasado sexto.
Rotundos triunfos en Santander y Pontevedra en pleno verano
Tres orejas más al esportón se llevó Tomás Rufo en Santander, una plaza de gran solera que remató una gran feria para esta temporada. En esta ocasión los toros fueron de la divisa salmantina de El Pilar, un hierro que conocía muy la terna conformada por José María Manzanares, Alejandro Talavante y el citado Tomás Rufo. Si rotunda fue su tarde en la capital cántabra, las tres orejas que paseó en Pontevedra no quedaron atrás dentro de un festejo donde Morante y Luque rascaron premio. Dos apéndices le cortó al tercero, y uno de enorme peso al sexto, toro con el que dio una lección de mando y temple.
El compromiso de Rufo con las plazas de tercera categoría
El Burgo de Osma, Tomelloso y Consuegra fueron tres de las plazas de tercera donde se anunció en pleno verano, cosos donde pusieron la materia prima los animales de Sorando, Montalvo y Alcurrucén. El 16 trenzó el paseíllo en el coso soriano, plaza donde saldría en hombros tras el corte de tres orejas. El día 29 igualaría el marcador con otras tres orejas en una tarde triunfal para la terna, siendo el 22 de septiembre la fecha elegida para el mano a mano con Luque Consuegra, plaza donde ambos saldrían en volandas tras cortar tres y dos orejas respectivamente.
Albacete y un paso adelante en su temporada pese a cicatería presidencial
El toledano llegó a una de sus citas más importantes del mes de septiembre, una plaza de toros de Albacete donde se anunciaba junto a Alejandro Talavante y Juan Ortega, dos de los espadas de la temporada. Una tarde donde rozó la oreja en el tercero de la tarde tras una labor de gran mando y sometimiento que el usía no quiso premiar con la oreja. El sexto no le daría opción alguna en una tarde donde únicamente Ortega pasearía oreja.
El tercero de la tarde tuvo movilidad y condiciones. Tomás Rufo realizó una gran faena. Ya de salida toreó a la verónica y dejó un gran quite por chicuelinas de mano baja. No se lo pensó dos veces y tras brindar al público se puso de rodillas y le dio tres tandas de derechazos con circulares, haciendo que la música se arrancara de golpe. Ya de pie lo cuajó por ambos pitones, demostrando que tiene cualidades para llegar a la cima del toreo. Lo toreo a placer por ambos pitones y el público estuvo muy metido en la faena. La espada emborronó toda la obra dejándola en una confortable ovación.
Los seis toros de Talavera y la apoteosis final
Ocho orejas y un rabo paseó Tomás Rufo en su encerrona del 21 de septiembre en Talavera de la Reina, una plaza que registró una gran entrada para ver un festejo que acabó en apoteosis. Una tarde para el recuerdo y dos toros de bandera que que fueron lidiados en tercer y cuarto lugar. ‘Casero’ de Victoriano del Río y ‘Rebujino’ de El Freixo se ganaron el premio de la vuelta al ruedo y el indulto en un festejo donde el de Pepino se vació por completo.
Al de Victoriano del Río de nombre ‘Casero’ se fue Tomás Rufo a recibirlo a portagayola. El lance dio emoción de inicio y las verónicas siguientes pusieron la calidad. Empujó el toro en el caballo toreándolo posteriormente con capote a la espalda. El toro metía la cara ya de una forma excepcional algo que no pasó por alto un torero deseoso de tomar la muleta. Brindó al empresario y ganadero talaverano Antonio Rubio antes de dejar un inicio de una calidad desbordante doblándose Rufo con un astado que hacía el avión. Las siguientes tandas mantuvieron el nivel de la anterior. La dimensión del toledano fue grande y por el pitón izquierdo los naturales fueron lentos con el de Victorino del Río arrastrando el hocico por la arena. Dos tandas más con la diestra precedieron un final de faena bello toreando con la mano izquierda a pies juntos. El pinchazo que precedió a la estocada no imposibilitó que Rufo cortará las dos orejas.
En el cuarto de la tarde llegó lo más granado de la tarde. Este fue un animal del Freixo al que se le pegó únicamente un puyazo al aparentar tener poca vida. Rufo apreció las cualidades del animal y lo brindó a su padre. La faena de muleta fue cumbre. El toro se entregó y fue de menos a mucho más con una embestida especial. Tomás estuvo entregado por ambos pitones con tandas largas y obligadas. Por el pitón izquierdo se paró el tiempo con series al ralentí. Ya bien avanzada la faena el público comenzó a pedir el indulto en masa. El presidente no estaba de acuerdo en darlo aludiendo a que el toro únicamente había recibido un puyazo. Cuatro tandas más levantaron a toda la plaza pidiendo nuevamente el indulto del toro. Rufo se olvidó del cuerpo y se gustó delante de un ejemplar que todavía iba a más. Ante una muchedumbre enfurecida el presidente sacó el pañuelo naranja y el toro volvió a los corrales ante una gran ovación. Sin trofeos dio la vuelta al ruedo un Rufo emocionado junto al ganadero y maestro Julián López El Juli.
Madrid y su tercera bala aprovechada del año
«El valenciano dejó una obra de verdad ante el manso segundo y el toledano rozó la oreja en el sexto, algo que impidió una estocada corta y trasera«. Así resumíamos la actuación de Román y Rufo con la corrida del Puerto de San Lorenzo el pasado 4 de octubre en la Monumental plaza de toros de Las Ventas, un festejo donde ambos dejaron claro que la temporada no les pesaba en absoluto. Corrida que completaba un Manzanares que pasó de puntillas ante los astados salmantinos.
Fardero se llamaba el sexto, toro largo y cuajado también de El Puerto, al que dejó un templado ramillete de verónicas Tomás Rufo. Arriesgaron, tras las varas -la segunda trasera- Andrés Revuelta y Fernando Sánchez en banderillas. Muleta en mano, dejó un inicio de tanteo y una primera seri por la derecha de poder ante el animal. Y en la segunda, por naturales, también domeñó su tranco noble y humillador, con el defecto de ir a menos. Volvió a la derecha y la faena mantuvo el nivel, dejando momentos de mucho gusto y mano baja el de Pepino, que acabo por doblones y una estocada corta un punto trasera que requirió de un efectivo descabello. Hubo petición no atendida por el palco y el manchego dio una vuelta al ruedo.
Zaragoza como broche de oro a su temporada
El 10 de octubre era la fecha elegida para el cierre de temporada, una tarde donde Daniel Luque y Tomás Rufo se fueron en hombros del Coso de Pignatelli en festejo sin suerte de Miguel Ángel Perera. La corrida enviada por Zacarías Moreno propició el triunfo de dos toreros que cerraron con un broche de oro su temporada.
«Pescadilla» era el tercero, de 517 kilos, pelo castaño oscuro listón, y nacido en diciembre del 19 y herrado con el número 54, con el que toreó a la verónica Tomás Rufo en el saludo capotero. Toro de buena encordadura y hechuras, que no quiso saber nada del caballo en cuanto sentía el hierro, quedándose muy crudo. Dejó un gran par de banderillas Fernando Sánchez. Se fue Rufo a los medios a esperar a que fuera ahí el protestón toro de Zacarías Moreno al que fue encelando primero y sometiendo después en buena serie de derechazos. Tuvo la virtud el animal de humillar mucho y seguir el engaño en excelentes pases naturales en dos series a más. Alternó circulares con pases cambiados y por alto luego Rufo, para cerrar con una buena tanda de naturales aún en los medios. Manoletinas de Tomás Rufo para cerrar es trasteo que coronó de una estocada caída no impidió la petición de trofeo concedida por el usía. Ovación para el toro de Zacarías Moreno.
«Cabezón» se llamaba el sexto, número 20, 534 kilos de peso y nacido en octubre del 19, y de pelo colorado, de acodada encordadura y con cuajo. Toreo a pies juntos y manos bajas de Tomás Rufo para recibir al toro. Se dejó pegar en varas el de Zacarías que tenía un prometedor comportamiento en las capas. Fernando Sánchez volvió a poner al público en pié que, junto a Sergio Blasco, saludó en banderillas tras un gran tercio. Brindis de Tomás Rufo para comenzar faena sobre las rayas de picar, de hinojos con pases de mano baja y profundidad, que pusieron la plaza en pie. Misma tónica tuvieron las siguientes series de derechazos, ya en pie, pero con la mano baja y llevando muy toreado al bravo toro de Zacarías Moreno, al que cuajó a placer el torero de Pepino. Bajó el ritmo del toro al natural pero no la intensidad de la faena. Volvió a la diestra el torero toledano pero el toro ya se puso más remiso haciendo amago de irse, y se fue, cerrando Tomás Rufo la obra con un bello paseo del desdén. Estocada trasera que acabó con la vida del toro sin puntilla y dos orejas para Tomás Rufo, con algunos votos en contra.