El pasado sábado, 16 de noviembre, se celebró una ‘convivencia campera y un tentadero solidario’ en la Hacienda ‘La Alta Escuela’, situada en el municipio sevillano de Morón de la Frontera. Dicha jornada, que resultó inolvidable y que llenó por completo los tendidos de la coqueta plaza de tientas, fue promovida por el novillero con picadores Manuel Martín Morilla, que contó con la colaboración de la Hermandad del Rocío de la referida localidad hispalense, con el objetivo de recaudar fondos para la Asociación ‘Mi Sobrino Manuel’.
El día comenzó con una de las labores de campo más importantes, como es el tentadero. Saltaron al ruedo dos ejemplares de la divisa de Torrehandilla, donados por parte de la ganadería, que resultaron bravos y nobles, embistie ndo con calidad y profundidad a los engaños. Martín Morilla cuajó una extraordina r ia actuación, demostrando que posee un concepto clásico y puro del toreo, además de una personalidad cautivadora y un sello de distinción, que le convierten en uno de los novilleros a seguir para la próxima temporada. El joven novillero de Morón
de la Frontera estuvo acompañado en todo momento por su nuevo apoderado, el maestro Juan José Padilla, que le aportó sabios consejos entre barreras.
Tras el tentadero llegaron la comida campera y actuaciones musicales en directo durante toda la tarde. Los artistas que contribuyeron gratuitamente a esta jornada solidaria fueron: David ‘El Galli’, Juan de Juan, Ignacio de Amparo, Manuel de Angustias, Alpairo y Chanel, Zenaida & Miriam Gallardo, NCala2, Coro de la Hermandad del Rocío de Morón, Alberto Reina y DJ Ramón Cabrera.
Como tantas veces sucedió a lo largo de la historia, el mundo del toro siempre está al lado de los que más lo necesitan, caso del niño Manuel, sobrino del gran torero de ‘Plata de Ley’, Juan Sierra, que padece la enfermedad del síndrome de Dandy Walker y la mutación del gen RAC1, que le provocan entre otras cosas ‘retraso en el lenguaje, pobre coordinación de movimientos, falta de equilibrio, hiperactividad, cardiopatía y epilepsia’.
Gracias a la iniciativa de Manuel Martín Morilla se cumplió el objetivo inicial de recaudar fondos para hacerle más fácil y llevadera la vida a las personas que tienen alguna de estas enfermedades, así como para progresar en el conocimiento e investigación de las mismas. Además se hizo acercando la Tauromaquia y el campo bravo a la sociedad, que de esta forma asimilará todavía más lo que el torero realiza en la plaza cada vez que se viste de luces.