El aficionado espera como agua de mayo el festejo del próximo domingo en la Monumental Plaza de Toros de Las Ventas, una corrida de toros que servirá para dar el pistoletazo de salida a la temporada en el coso venteño. Ha pasado un largo invierno desde que se celebrara la última corrida de toros, un festejo en el que Miguel Ángel Perera y Emilio de Justo trenzaran el paseíllo con los toros de la A Coronada.
Más de cinco meses después, será la divisa cacereña de Adolfo Martín aquella que descorche la temporada. Un festejo que, a pesar de las malas previsiones meteorológicas, no corre peligro por la lona instalada desde hace días en el ruedo venteño por parte de la empresa Plaza 1.
Si hace días la empresa desvelaba los toros reseñados mediante varias fotografías y un vídeo grabado en la propia finca, el pasado martes le tocó a Adolfo Martín hijo -en una de sus primeras apariciones públicas al frente del hierro- hablar de los ejemplares reseñados para el festejo del próximo domingo. Son pocas las veces que se ha visto al frente de la vacada, al ser siempre su padre la imagen de ésta; pese a ello, ha sido su progenitor quien le ha cedido el testigo en esta ocasión para la grabación de esta breve entrevista.
Se trata de una vacada que abrirá por primera vez temporada con corrida de toros en Las Ventas, una responsabilidad para unos ganaderos que siempre han estado acostumbrados a ir en San Isidro u Otoño. Para esta ocasión la empresa ha cerrado un cartel donde están anunciados el madrileño Iván Vicente, el salmantino Damián Castaño y el jiennense Adrián de Torres. “Se trata de corrida seria pero muy armónica. Es 100% cinqueña, de los cuales cinco toros rozan los seis años. Como es lógico por la edad los animales tienen una seriedad y un trapío mayor” explicaba Adolfo Martín Jr.
Una corrida variada de sementales donde muchos de los focos están puestos en el 85 Chaparrito y en el 101, dos ejemplares que gustan especialmente a la familia Martín. Es, además, una corrida abierta de sementales, siendo estos ejemplares contrastados en la vacada extremeña.
Ahora queda que pasen sin problemas los reconocimientos veterinarios, que ninguno se estropee y que puedan saltar a la arena venteña y poder dar el juego que todos los aficionados esperan de ella.