Alejandro Talavante se marchó sin hacer ruido publicando un inesperado comunicado que conmocionó a todo el orbe taurino hace ya casi dos años y cinco meses. Una decisión sorprendente, que fue anunciada una tarde de octubre de 2018 tras torear en la plaza de Zaragoza junto a Juan José Padilla, que se despedía de los ruedos ese mismo día. Pocos días antes, Talavante se había echado sobre los hombros aquella feria de Otoño en la que Simón Casas ideó el bombo anunciándose dos tardes y las cosas no habían salido cómo al extremeño le hubiesen gustado.
Desde entonces, la afición ha quedado huérfana de una de las zurdas que interpretan el toreo con mayor pureza, de una figura con una personalidad arrolladora y con un sello inconfundible que lo diferencia del resto. Y es que durante su carrera, Talavante no ha vacilado en hacer apuestas fuertes como anunciarse en Madrid con todo tipo de ganaderías o encerrarse con seis toros en la primera plaza del mundo, levantando una expectación que se encuentra al alcance de muy pocos toreros del escalafón actual.
Su regreso en Arles previsto para el pasado año, truncado por el coronavirus
Su vuelta, prevista para el pasado año en la plaza francesa de Arles de la mano del empresario Juan Bautista, quedó truncada por la pandemia y las ilusiones de los aficionados de volver a disfrutar de la zurda del pacense cayeron en saco roto.
Un mínimo de un 80% de aforo en las plazas para reaparecer
Tras su fallida reaparición, todo parecía indicar que por fin el 2021 sería el año del regreso de Talavante a las plazas. Sin embargo, de momento la espera continuará, pues tal y como informó Cultoro la semana pasada, el extremeño ha acordado junto con su apoderado, José Miguel Arroyo «Joselito», que no reaparecerá mientras no pueda garantizarse un mínimo del 80% del aforo en las plazas en las que se anuncie, una condición muy difícil de salvar a día de hoy debido a las duras restricciones sanitarias.
Aunque no se ha vestido de luces, Alejandro no ha estado alejado del toro durante todo este tiempo. La figura extremeña ha seguido preparándose a puerta cerrada. Así lo pudimos comprobar hace un mes cuando se difundieron unas imágenes del diestro toreando en la plaza de toros de Valdemorillo, un coso que también había elegido el pasado año para seguir entrenando y llegar en plenas condiciones a su ansiada reaparición.