De nuevo el campo bravo está de luto. El Covid sigue cobrándose víctima y otra vez ha atacado al corazón de La Fiesta. Nos ha dejado todo un SEÑOR, en mayúsculas y con todas las letras: Don José Luis Iniesta. Extraordinario ganadero, fantástico aficionado, gran empresario y fenomenal persona. La dehesa extremeña vuelve a decir adiós a otro de sus más ilustres defensores. Mimó y cuidó al toro como pocos.
Varias fueron las veces que hablé con él y hasta compartí mesa y mantel. A su casa se podía ir siempre, nunca puso un pero. Daba gusto mantener una charla con él. Hizo de la honestidad, sinceridad y educación su bandera. Sin lugar a dudas le echaremos de menos.
Valga desde aquí mi más sincero y profundo pésame a toda la familia a la par que debemos pensar que ya estará junto al Padre y que desde ahora gozará de una vida eterna en compañía de amigos y colegas de profesión.
D.E.P. Don José Luis Iniesta.