Stéphan Guin / Fotogalería: Muriel Haaz
Llegaba uno de los duelos del año en la tarde de este sábado a la Feria de la Vendimia nimeña, un festejo en el que dos de los gallos de pelea en este país, Daniel Luque y Juan Leal, se batían en duelo con un encierro de Garcigrande y Domingo Hernández. A las cinco y media arrnacaba el paseíllo.
La izquierda de Luque reluce frente al peligro sordo del primero y la puntilla se lleva la oreja
Número 58 era el primero, de 533 kilos, castaño de capa y nacido en octubre de 2015, ofensivo de cara y abanto de salida, por lo que Luque no pudo lucirse con el capote. Empujó fuerte el de Domingo en la primera vara, dejando un quite por saltilleras y revolera Juan Leal. En el inicio de faena, Luque entendió las opciones por el lado izquierdo del astado, donde tenía ritmo y clase. Temple y verticalidad dejó el sevillano en las tres primeras series por la zurda. Faena muy importante con clase y entrega de Luque frente a un animal con peligro sordo. Mató de estocada casi entera un punto tendida y el tercero levantó al toro cuando se echó, lo que hizo que el premio quedase en ovación.
Leal monta el taco ante un segundo de vuelta al ruedo: faena cumbre al natural y dos orejas
El segundo fue un animal castaño de capa, nacido en octubre de 2015, número 103, de 515 kilos, un animal al que Leal saludó con verónicas genuflexas. Tras las dos varas reglamentarias, quitó por chicuelinas Luque y dejó un estupendo remate a una mano. Inició faena con fuerza el trasteo el francés, con dos péndulos de rodillas. Tenía fondo, prontitud, humillación y largo recorrido el de Domingo y lo supo aprovechar un Leal que trazó su embestida por abajo al natural, por donde estuvo roto el torero. Impecable en el toreo fundamental. Cumbre fueron las siguientes series por la zurda, toreando a cámara lenta: no se pudo torear más por abajo al humillador animal. Fue cogido en la parte final de la faena, sin consecuencias aparentes, y de nuevo de trazo largo y por abajo para epilogar obra. Espadazo sin puntilla y dos orejas de mucho peso. Vuelta al gran animal.
Luque, faena de oficio al noble pero falto de chispa tercero
Negro mulato listón, número 59 y de 508 kilos era el tercero de la tarde, animal astifino de pitones, al que dejó cuatro verónicas y una media de cartel Luque. Sin pena ni gloria el tercio de varas, rematándolo Leal por gaoneras en el quite. Por alto fue el inicio de faena de Luque, que dejó un cambio de mano estupendo. Tenía nobleza y humillación el animal pero el faltaba chispa y raza. Faena de oficio de Luque, que mató de pinchazo y espadazo casi entero. Palmas.
La falta de celo y recorrido del cuarto lastran la entrega de Leal
El cuarto de Domingo Hernández tenía 512 kilos, colorado de capa, de octubre de 2016, no se entregó en el capote de Juan Leal, mostrándose flojo de salida pero empujó luego con fuerza en los dos puyazos. Con péndulos en los medios comenzó su obra Leal, manteniendo ritmo y recorrido el animal, pero le faltaba raza y fuerza cuando el galo le bajaba la mano. No pudo transmitir porque el recorrido del animal iba muy a menos. Optó por las cercanías el torero en el tramo final, matando de espadazo pero de efecto lento, lo que le hizo perder premio. Silencio tras aviso.
Luque busca el fondo del quinto y lo encuentra: oreja
Esfuerzo sincero de Luque en el quinto, número 56, de octubre de 2016, animal negro de 545 kilos, alto de estampa y de buen trapío. Fue muy frío de salida el de Domingo, pero poco a poco lo fijó Luque con dos verónicas y una buena media. Animal que tenía movilidad pero le costaba humillar. A base de construir con inteligencia y experiencia su obra, consiguió meterse en sus terrenos y le robó momentos de mucho jugo. Mató de pinchazo y espadazo. Ovación.
Una oreja de peso más para Leal de la alimaña sexta
Muy complicado fue el sexto, número 34, de 517 kilos, un animal que pegaba tornillazos y al que se impuso de principio a fin Leal. Animal con buenas hechuras y astifino de pitones, al que saludó de rodillas, pero el animal siempre buscaba la zona de fuera. Empujó con fuerza en el caballo y se fijó solamente en el segundo encuentro. Toro al que tragó mucho el galo por su mansedumbre, y le hizo el toreo cruzándose ante una auténtica prenda. En uno de los derrotes secos, fue volteado Leal, que intentó siempre buscar el buen toreo por abajo. Arrimón final y estocada: paseó una oreja con fuerte petición de la segunda.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Nimes, Francia. Cuarta de abono de la Feria de la Vendimia. Corrida de toros. Unas 5.000 personas en los tendidos.
Toros de Garcigrande y Domingo Hernández -el segundo de vuelta-.
Daniel Luque, ovación, palmas y oreja.
Juan Leal, dos orejas, silencio tras aviso y oreja.
