LIMA (PERÚ)

Dos ovaciones y dos heridos


domingo 29 octubre, 2017

Ángel Sánchez, Román Martínez y Carlos Cabello arrancaron la feria del Señor de los Milagros con los percances de los dos últimos frente al encierro de La Centinela

Ángel Sánchez, Román Martínez y Carlos Cabello arrancaron la feria del Señor de los Milagros con los percances de los dos últimos frente al encierro de La Centinela

LUCHO HERENCIA

Abanto el “Marqués” primero, de 390 kilos, un novillo saliendo suelto en las telas de Ángel Sánchez. Tesón y poderío fueron las bases del trasteo de Sánchez, buscando a toda costa estructurar una faena ante el aplomado novillo que siempre remató por arriba. La derecha fue su arma de firmeza entre la atropellada embestida no sin antes intentarlo al natural previo al encuentro del estoque envasado entero pero algo atravesado. Ovación.

Con un tercio de entrada en los tendidos daba comienzo, en la tarde de este domingo, la Feria Señor de los Milagros en la bicentenaria plaza de toros de Acho, en el corazón de Lima. Ángel Sánchez, Román Martínez y Carlos Cabello se enfrentaban a un encierro de La Centinela.

Quiso alegrar Román Martínez en el saludo capotero a “Dormilón”, con una entrevista inicial interesante del de La Centinela. Humillaba y embestía con transmisión el “centinela” a las telas y luego Martínez ejecutó el tercio de banderillas con alegría aunque fue volteado en el segundo par. Cerró el tercio con un aclamado par al violín tras el achuchón sin consecuencias. Se fue apagando el novillo con la pañosa poniendo el mexicano la cuota de alegría y buscando el toreo entre su bisoñez de novillero. La consigna de aprovechar al máximo posible a su oponente rindió frutos en momentos, corriendo la mano a gusto y con la impronta del sabor de su toreo de escuela mexicana. Se atoró con la tizona hasta envasarla al tercer encuentro para rematar luego de varios intentos con el descabello. División.

Saludó con disposición en el percal el peruano Cabello, doblándose en el recibo y gustándose a la verónica. Quiso el cajamarquino en todo momento, en pasajes de buen toreo, con gusto y detalles, cobrando una fea voltereta de la que se repuso para volver a la cara y continuar la faena dejando muletazos sueltos a gusto. Cogido tras dejar media estocada efectiva pasaó a la enfermería entre palmas.

Con un bonito saludo a la verónica inició su labor Ángel Sánchez al cuarto, desmayado y mecido a velocidad baja. Muy torero el inicio por bajo flexionando la rodilla para suceder derechazos aplomados y enclasados en distintas tandas hasta hacer sonar la música. Prosiguió con la diestra a buen nivel y también lo probó al natural, con menos lucimiento. Ambición y garbo dieron la nota en un trasteo de novillero cuajado, dosificando la faena a la que rubricó en el segundo envite con la espada. Palmas.

Firme y variado Román Martínez en el saludo capotero de su segundo, en el que mezcló afarolados y una larga cambiada de remate. Feo trancazo se llevó Martínez, del que salió inconsciente, siendo cogido de lleno desde el abdomen. Pasó a la enfermería. Con poderío y conocimiento se hizo cargo de este novillo Ángel Sánchez tras la cogida del compañero. Lo hizo todo despacio, midiendo tiempos y terrenos aunque la faena no terminó de despegar. La espada no le acompañó, hasta rematar con el estoque de cruceta. Silencio.

En contra de la voluntad médica, salió a lidiar al cierraplaza, con una venda desde la rodilla haciendo mucha compresión ya que tenía un esguince de tercer grado. Recibió con mucho ánimo al sexto novillo. Hambre de novillero de Carlos Cabello que lo intentó ante un complicado ejemplar de la Centinela, al que trató de buscar faena con detalles aislados y mucha predisposición de agradar. Cobró una estocada entera y mantuvo su crédito intacto ante la afición limeña que le ovacionó.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Acho, Lima (Perú). Un tercio de entrada. Primera de la Feria Señor de los Milagros. Novillada con picadores.

Novillos de La Centinela.           

Ángel Sánchez, ovación, palmas y silencio en el que mató por Martínez. 

Román Martínez, división y herido. 

Carlos Cabello, palmas camino de la enfermería y ovación.