JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO /
FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ-OLMEDO
El pasado 26 de marzo Diego Carretero sorprendió en la
primera plaza del mundo a la que hoy vuelve. Tras el toque importante de
atención en la primera novillada de la Feria de Fallas, lo volvió a repetir en
la calle de Alcalá paseándole una oreja a un gran novillo de Fuente Ymbro que
hizo sexto del encierro. «Vengo de Madrid y la próxima que tengo
es Madrid, la que me ha dado lo que tengo”, señaló el joven albaceteño
tras el apéndice. CULTORO quiso estar cerca de él en los días posteriores a su
triunfo venteño y antes de torear hoy en Madrid.
Diego, ¿cómo viviste
el triunfo y cómo viste aquella faena a aquel gran novillo de Ricardo Gallardo?
La tarde fue muy bonita. Fue de menos a más y el último fue
un novillo que dejó una faena para entregarse con el corazón y el alma. Pude
disfrutar momentos únicos y bonitos.
En el boca a boca de
la afición ha destacado tu gran toreo al natural, una faceta desconocida que si
bien los animales no te habían podido dejar expresar en los últimos meses ayer
sí lo pudiste sacar a relucir.
Fue una faena en la que me entregué en cuerpo y alma. Sentí
Madrid de verdad. Fue muy bonito.
¿Cómo calificarías al
novillo desde su salida hasta su arrastre?
Fue un buen animal. Desde el inicio lo vi y fue a más. No
puedo decir nada yo que no dijera el toro, porque en general la novillada fue
buena.
Suponemos que un
soplo de aire fresco porque después de Algemesí o Valencia, también Madrid
valora la entrega diaria que, junto al maestro Luis Rubias, llevas a cabo
durante todos estos años.
Pues sí. Es mucha la lucha y cada momento y cada toro hay
que aprovecharlo al máximo. Dependemos de esta lucha y es lo que nos ha llevado
hasta aquí y es lo que nos va a seguir abriendo puertas.
¿Cuáles fueron sus
primeras palabras tras la oreja?
Que hay que empezar a corregir los matices de la faena y
errores que siempre hay, y sobre todo avanzar, porque el camino es muy largo.
Hay que disfrutar de esa oreja pero hay que seguir hacia adelante,
evolucionando más y seguir creciendo.