CALASPARRA

Juan de Castilla y Adrien Salenc cortan oreja a base de garra


martes 6 septiembre, 2016

Una novillada muy baja de raza impidió el triunfo de una terna que puso todo de su parte para lograr el triunfo

Una novillada muy baja de raza impidió el triunfo de una terna que puso todo de su parte para lograr el triunfo

PEDRO M. MELLIMAS/  FOTOGALERÍA: RASPA

Adrien Salenc sustituía hoy a su compañero Juan Carlos
Carballo que cortó la temporada tras romperle la tibia y el peroné un novillo
en Madrid cuando lo esperaba a portagayola. Junto a él hacían el paseíllo
Manuel Ponce, apoderado por el decano de los matadores de toros murcianos
Alfonso Romero, y Juan de Castilla, que resultó triunfador del Trofeo Espiga de
Plata en Calasparra en el año 2013. Los novillos y toros de Sobral, no
confundir con Condessa de Sobral, son conocidos como los «Cebadas portugueses”.

Deslucidote fue el primero de la tarde, con el que quedó inédito Manuel Ponce con el capote. Ya en el último tercio, el animal tuvo movilidad, pero echó la cara arriba, protestó y fue complicado. Aún así puso voluntad Ponce, que lo intentó por ambos pitones e incluso logró algún natural muy estimable, pero la estocada defectuosa precedió al silencio.

En el segundo sobresalió un meritorio quite por chicuelinas de Juan de Castilla, pero resultó ser un animal muy flojo con el que no se terminó de acoplar el colombiano, a pesar de lograr momentos de cierta lucidez. Lo que sí manejó bien fue la espada, y tras el estoconazo saludó una gran ovación.

Sin fuerza ni raza salió el tercero, con el que siempre estuvo bien colocado y a favor de obra el francés Adrien Salenc, que supo ponerse y ponerla para hacer que embistiese el novillo lo poco que sabía. Porfión y voluntarioso, no le volvió nunca la cara y supo conectar con el tendido para arrancarle una oreja de mucho peso al utrero.

Ofensivo por delante era el cuarto, que se arrancó con viveza al caballo pero luego echó la cara arriba con deslucida actitud en las telas de Manuel Ponce. Apenas tuvo opciones el novillero, que no terminó de acoplarse a la brusquedad del animal, falló con la espada y escuchó silencio.

Con el quinto se gustó mucho Juan de Castilla con el capote, antes de que se arrancase el animal con fijeza y bondad al caballo. En la muleta fue complicado, con un pitón izquierdo algo más potable por el que se puso con mucha firmeza el colombiano, muy en novillero, que nunca se dejó nada en el tintero. Se tiró a matar sin muleta, incluso, y le arrancó una oreja al animal. 

Tampoco el sexto tuvo la raza para que Adrien Salenc hiciese el toreo. Se lució en banderillas José Mora, pero no pudo pasar el francés de estar en novillero y con la garra suficiente para gustar en Calasparra. Lo intentó todo por ambos pitones, pero se estrelló contra la falta de voluntad del animal y contra el fallo con los aceros, que lo dejó todo en silencio, pero dejando un buen sabor de boca.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Calasparra, Murcia. Cuarta de la Feria del
Arroz. Novillada con picadores. Menos de media entrada.

Seis novillos de Sobral.

Manuel Ponce, silencio y silencio.

Juan de Castilla, ovación y oreja. 

Adrien Salenc, oreja y silencio.

 

Incidencias: Durante la lidia del quinto novillo el banderillero Manolo Macías sufrió la luxación de un dedo.