El Muletazo
A pesar de la poca publicidad que se le dio al evento, sorprendió la gran entrada que registró la plaza de toros portátil instalada en Lorca, que acogió este domingo, 17 de abril (Domingo de Resurrección), una corrida de rejones para poner punto y final a su Semana Santa en la que actuaron Andy Cartagena, Joao Moura Caetano y Lea Vicens frente a reses de “El Madroñal”.
Animados por el buen clima reinante en la Ciudad del Sol, el coso de chapa se llenó casi en la totalidad de su aforo, sin duda, la mejor noticia que arrojó la celebración del festejo, algo que evidencia las ganas que tiene Lorca de toros y de ver su plaza de toros de Sutullena de nuevo en marcha. La peor noticia fue el lamentable estado del ruedo, que hizo que el espectáculo no alcanzara cotas altas, llegando incluso a anular las intenciones de un actuante, que prácticamente tiró la toalla. Ningún rejoneador paró a los toros de inicio, haciendo que los auxiliadores tuvieran más trabajo de la cuenta.
Abrió el festejo Andy Cartagena con un toro parado con el que no consiguió el lucimiento con los rejones de castigo. Poco a poco el de Benidorm se fue confiando, no por las malas condiciones del oponente, sino por el pésimo estado del piso. Se lució en banderillas, clavando arriba y haciendo despertar al público. Arriesgó Andy, metiéndose en terrenos cercanos del toro poco colaborador. Estuvo el jinete efectivo con las cortas. Atronó al animal de un rejón trasero y un pinchazo. No se bajó del caballo para descabellar, haciendo más larga la agonía del bicho, que finalmente terminó doblando. Escuchó silencio del respetable.
Desde que Moura Caetano comprobó el estado del ruedo, sus ganas se fundieron, se pagaron, se extinguieron. El espectáculo que dio con su primero no estuvo a la altura de un rejoneador que lleva ese apellido ilustre. No se confió ni se atrevió en ningún momento. Quiso abreviar con la hoja de peral, pero tampoco pudo hacerlo. Dejó dos pinchazos y rejón. El silencio del público fue todo un regalo para él.
Lea Vicens salió espoleada en el tercero de la tarde. La amazona francesa realizó una labor vibrante. Clavó con elegancia dos rejones de castigo para después armar una faena con mucha clase y conexión con los tendidos. Puso las banderillas arriba, ejecutando perfectamente los quiebros y toreando con los pechos del caballo. Animó a un público algo decepcionado por lo que había pasado en los dos primeros toros. Tenía las orejas cortadas, pero varios pinchazos antes de dejar un rejón efectivo dejaron el premio en tan solo un apéndice.
A por todas salió Andy Cartagena tras el descanso. Muy centrado en la labor, expuso en banderillas ejecutadas con la elegancia que le caracteriza. Sobresalientes fueron dos pares al violín. Terminó la labor clavando arriba las banderillas cortas. Dos pinchazos antes de cobrar un efectivo rejón no impidieron que pasease las dos orejas.
No fue la tarde de Joao Moura Caetano. No acabó de encontrarse a gusto ni de entrar en las faenas. Sin entrega ni emoción terminó su comparecencia con dos pinchazos y un rejón, siendo silenciado.
El sexto presentó problemas de visión y dificultó la lidia a caballo. Lea Vicens puso todo de su parte para agradar. Se alargó a la hora de matar, poniendo pie a tierra terminando con un certero descabello y cortando una oreja en agradecimiento a la entrega mostrada durante toda la tarde.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros portátil de Lorca (Murcia). Corrida de rejones. Toros de El Madroñal, manejables. Casi lleno para,
Andy Cartagena, silencio y dos orejas
Joao Moura Caetano, silencio y silencio
Lea Vicens, 1 oreja y 1 oreja