Tiempos revueltos para la tauromaquia en México con la decisión judicial de prohibir los festejos que restaban en la temporada capitalina, una decisión que augura que lo pero aún puede estar por llegar. Sin embargo, en una de esas paradojas con que nos sorprende la vida, después de unos años en los que no sólo la pandemia ha alejado a los toreros mexicanos de las temporadas españolas, la recién acabada Feria de San Isidro ha vuelto a poner en la palestra a matadores de ese país que por unas u otras razones ya parecían olvidados aquí y novilleros que han causado impacto. Y, entre los matadores, Leo Valadez.
El torero hidrocálido llegó a la alternativa, en la Feria del Pilar de 2017, con relativa fuerza pero, a partir de ahí dejó España, donde llegó con doce años y dio sus primeros pasos en la Fundación de El Juli en Guadalajara y regresó a México donde ha permanecido hasta ahora, preparándose y toreando en plazas del país, con una sola incursión en Francia el año pasado, en Istres, donde cortó tres orejas.
Así las cosas, Valadez confirmó alternativa en Las Ventas el pasado 22 de mayo y cortó una oreja a su segundo toro, causando- también en el de la ceremonia- impacto en los aficionados y la crítica taurina, coincidentes en ponderar su actitud (sufrió una tremenda voltereta que pudo tener graves consecuencias y se quedó en el susto) entrega, firmeza y amplio repertorio de suertes.
Ahora sigue con la preparación en el campo, en su refugio de Guadalajara y con él hablamos, vía telefónica.
Pasados los días, digerido lo que sucedió en Las Ventas ¿qué sensaciones te quedan?
Ante todo muy contento por haber cumplido el sueño de confirmar en Madrid y que el haber cortado una oreja es la consecuencia de un esfuerzo de mucho tiempo, pero soy consciente de que tengo mucho más para dar, tengo plena confianza en mi. Y que cuando toree en otras plazas y vuelva a hacrelo en Las Ventas todo eso se verá.
Desde 2017 no toreabas en España ¿el Leo Valadez que se ha encontrado la afición española, además de la madurez que da el paso de los años, qué mantiene y en que ha cambiado?
Conforme maduras vas viendo el toreo de otras forma pero lo que no ha cambiado son las ganas de estar cada tarde al máximo y, por supuesto, seguir con la variedad de lances y suerte, que supone un gran atractivo para el espectador y enriquece la tauromaquia.
Has mencionado la determinación y la variedad, precisamente lo que público y medios han valorado más.
Son parte de mi tauromaquia pero no me quedaría con eso solo, ni mucho menos. Sé, como te decía, que puedo dar mucho más, en España sólo me han visto de matador en la tarde de la alternativa y ahora en Madrid. Creo que es muy pronto para limitar el juicio, tanto por parte de la gente como por mi mismo y, repito, sé que tengo mucho más que ofrecer e irá saliendo conforme vaya toreando en las distintas plazas. Me tranquiliza, como torero, haber dejado esa buena impresión pero ni mucho menos me conformo.
¿El desaparecer del panorama europeo y centrarte solo en México ha supuesto un aprendizaje continuado para tu desarrollo profesional?
En México tengo la fortuna de estar toreando mucho y además en carteles muy buenos y en todas las ferias y pensaba que cuanto más tardase en regresar a España más preparado me verían, Y creo que el tiempo me ha dado la razón.
Ha coincidido con una digamos nueva forma de mirar a los toreros mexicanos que ahora sí parece van a entrar en la temporada española.
Me retiré de las redes sociales hace un tiempo porque a veces me afectaba lo que leía y ahora sí que es verdad que tanto mis compatriotas como yo creo que estamos recibiendo el trato que nos ganamos en el ruedo.
Toreaste en el cartel de banderilleros, una cartel que hace años era fijo tanto en San Isidro como en muchas ferias pero ahora en desuso ¿te siente cómodo en él?
Es una cartel de toreros que además de torear sabemos banderillear y dar espectáculo en ese tercio. Evidentemente no baso mi tauromaquia en las banderillas pero si toreo en más carteles de esas características para nada me importaría.
Llegaste a España con 12 años, fuiste el primer alumno en el CITAR de El Juli en Guadalajara, zona en la que resides. ¿Dónde encuentras un mayor arraigo, en tu México natal o aquí, ahora?
Uno siempre tira para la tierra, estoy muy orgulloso de ser mexicano, pero también, desde muy temprano, sabía que para desarrollarme como torero tenía que venir a España, algo que no sólo yo pienso. Por eso estoy muy feliz de mi formación en España.
Después de torear en Madrid, viaje de ida y vuelta para torear una corrida en León, reencuentro con el “toro mexicano”. Y ahora, en el horizonte inmediato y como premio al triunfo en Las Ventas, anunciado en San Fermín con el “toro de Pamplona”, nada menos.
Cuando veía por televisión las corridas de Pamplona es evidente el tamaño y el trapío del toro que sale allí. Pero cuando uno es torero sueña con torear en plazas como Las Ventas o en Pamplona y asume el toro que se va encontrar.
La temporada es larga ¿han habido contactos, llamadas, para ir entrando en las feria y carteles que están por venir y aún no se han cerrado?.
Antes de Pamplona toreo en Istres el 19 de junio y después de esas dos corridas ojalá vayan llegando muchas más. Para ello entreno y me preparo al máximo. En Istres y Pamplona se verá. Y partir de ahí…
Istres y su Feria es la primera cita de Leo Valadez tras su éxito en Madrid. El público de allí ( y los que llegan de otros lugares, incluida la Catalunya sin toros, esa tierra donde nació y se hizo torero César Pérez, junto a Leo Valadez desde sus inicios) que como se mencionaba antes le vio triunfar a lo grande el año pasado, espera expectante al joven torero mexicano.
Una Feria, la de Istres, que de la mano del incansable e imaginativo Bernard Marsella cada año que pasa se consolida en la programación del sureste francés y siempre reúne argumentos y alicientes de interés que hacen que El Palio se llene, con una base de abonados que renueva año tras año su compromiso.
En la edición que empieza el próximo viernes 17 de junio (toros de Pedraza de Yeltes, para Manuel Escribano, Javier Cortés y Jesús Enrique Colombo) estarán varios de los triunfadores del ciclo anterior y se homenajeará a la Maestra Nati en una corrida (matinal domingo 19 junio, toros de Virgen María) mano a mano Salenc-El Rafi, que llevará su nombre y en la que el triunfador se llevará un capote de paseo de su marca
Antes, el sábado 18, matinal con novillos de Espartaco (que también recibirá un homenaje por su trayectoria profesional) para una terna de gran interés: Jorge Martínez, Christian Martin y Raquel Martín, Por la tarde, reses de Jandilla para la alternativa de Carlos Olsina, torero nacido en Béziers, de manos de José María Manzanares y Paco Ureña como testigo.
El cierre, el domingo por la tarde, la ya consolidada “Corrida charra”, con reses de Victoriano del Río para Antonio Ferrera, Tomás Rufo (que entra por le lesionado Emilio de Justo) y Leo Valadez.
Suerte para todos.