Madrid, 2 de mayo de 2016 – JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO / FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO
Veinte años se cumplían este lunes 2 de mayo de la histórica encerrona goyesca de José Miguel Arroyo «Joselito” en la plaza de Las Ventas en la que se fue en volandas y, dos décadas más tarde, comparecía como ganadero en la primera plaza del mundo. Miguel Abellán, Iván Vicente y Juan del Álamo hacían a las seis y media en punto el paseíllo en la calle de Alcalá.
Indefinido se mostró el primer toro de la tarde, con el hierro de El Tajo, al que le tuvo que dar distancia en el quite por chicuelinas Abellán para que se desplazara. Los palos de Manuel Bernal, medidos, y la lidia económica de Miguel Martín hicieron que el astado humillara en el inicio muleteril, para comenzar a quedarse corto en la segunda tanda a diestras del torero capitalino. Entre parones del toro debió administrar los muletazos Abellán, consiguiendo la ligazón en la siguiente por el derecho, pero sin terminar de apretarle al de Joselito. Basó todo el trasteo, largo éste, por un pitón derecho que fue el más potable dentro del monótono tranco del astado toledano, cruzándose Abellán en los finales a zurdas. Tras los detalles finales en la segunda raya del tercio, dejó espada en mano el veterano una media que escupió y una segunda defectuosa.
No terminó de definirse un segundo ya con el hierro de La Reina al que intentó mecerle el capote a la verónica Iván Vicente antes de que tomara bien la seda del subalterno Joselito Rus. Muchísima elegancia tuvo el inicio muleteril del de Soto del Real, para tomarle el tranco al toro de Joselito por la mano derecha por momentos. Perdió el gas y la alegría que lo caracterizó en la primera parte de la faena cuando intentó plantearle con valor Iván más muletazos a diestras, sin conseguir que rompiese el trasteo ante un toraco de seria estampa pero aplomado.
Con una larga cambiada en el tercio recibió Juan del Álamo al tercero, protestado de salida por ser bajo de estampa. Intentó quitar por chicuelinas Abellán con un toro humillando y que clavó los pitones en la arena para darse una voltereta. Fue víctima de su propia codicia el toro, volviendo a hincar los pitones en la arena para rebozarse poco después en las telas de Del Álamo rompiéndose por abajo. Antes, el mirobriguense brindó su faena al público de Madrid. Sacó la bravuconería que mostró en el caballo por ese lado derecho, en la muleta tersa de un joven que sonsacó otra excelente tanda en redondo. Al natural intentó rematar su labor Juan, sacándose hacia afuera el tranco noblón y humillador del toro. Por manoletinas terminó su labor para, espada en mano, dejar una estocada un punto caída de la que tardó en caer porque se amorcilló. Cortó la oreja.
Parado de salida era el cuarto, que se enceló en el caballo que montaba Domingo García «Jabato”. Quitó muy suave por verónicas Iván Vicente ante de dos grandes pares de Miguel Martín. Brindó al público el torero paisano para iniciar trasteo por el derecho en el centro del anillo, doblando el toro las manos en dos ocasiones durante la tanda en redondo. A partir de ese momento se vino a menos el toro de Joselito, dejando una estocada el torero que fue lo mejor de su actuación.
Le supo mecer el capote a la verónica con muchísimo gusto Iván Vicente al quinto, un toro que no dejó de mostrar la cara arriba desde el primer momento. Tampoco varió su conducta en el caballo que montaba Héctor Vicente, hermano del matador, que se llevó una fuerte ovación del público. Lipi y Jesús Robledo «Tito” se gustaron palos en mano antes de que Vicente brindara al público madrileño su labor. No terminó de romper el tranco de un toro al que intentó bajarle la mano pero su embestida a la defensiva deslució todo. Le hizo extraños también en los embroques, que junto a la falta de chispa hizo que no despegara la labor del capitalino. Una estocada puso fin a su labor.
Era el sexto la oportunidad de Juan del Álamo de salir por la Puerta Grande, y tuvo emoción en los primeros compases del trasteo. El salmantino lo intentó todo desde el primer momento, pero manseó el de Joselito en ese momento y debió sacarse como pudo al astado a las afueras. Enfocada fue la faena a sujetar en las afueras al toro con un Del Álamo que intentó por todos los medios salir a hombros ante el incierto tranco de un toro que se marchaba de la muleta obligando así al torero a ir en su búsqueda constante. Rajado el de El Tajo, sólo pudo meterle el acero el torero castellano.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Las Ventas. Segunda de la Miniferia de la Comunidad de Madrid. Tradicional corrida de toros goyesca.
Dos toros de El Tajo y cuatro de La Reina, desiguales de presentación y juego, sobresalió el gran tercero.
Miguel Abellán, silencio y división de opiniones.
Iván Vicente, ovación y palmas.
Juan del Álamo, oreja y palmas.