AGUASCALIENTES (MÉXICO)

Urdiales por encima de un descastado encierro de Bernaldo de Quirós


lunes 18 abril, 2016

Ni el debutante riojano Diego Urdiales ni los locales Arturo Macías y Fermín Espinosa “Armillita IV” han tenido forma y manera de encontrar el lucimiento en sus respectivos lotes

Ni el debutante riojano Diego Urdiales ni los locales Arturo Macías y Fermín Espinosa “Armillita IV” han tenido forma y manera de encontrar el lucimiento en sus respectivos lotes

ADIEL ARMANDO BOLIO

La primera corrida de la CLXXXVIII edición de
la Feria Nacional de San Marcos tuvo como mancha el pésimo juego que dio el
encierro de la dehesa de Bernaldo de Quirós, a través de la sosería y descaste
de sus astados, incluyendo la falta de fuerza, lo que impidió que la tercia
torera tuviera la materia prima idónea para hacer el toreo que cada uno sabe
interpretar.

De esta manera, ni el debutante riojano Diego
Urdiales ni los locales Arturo Macías y Fermín Espinosa «Armillita IV” han
tenido forma y manera de encontrar el lucimiento en sus respectivos lotes.

Así que ante menos de media entrada en el coso
Monumental de la ciudad de Aguascalientes en tarde entoldada y algo de viento
en los tres primeros astados, se lidiaron seis ejemplares de la divisa
guanajuatense de Bernaldo de Quiros que, como ya se ha apuntado adolecieron de
casta y falta de raza, siendo si acaso los más toreables lo corridos en segundo
y cuarto lugares.

En el toro que abrió plaza, el espada riojano
debutante en este ruedo, Diego Urdiales se dejó ver empeñoso y oficioso con el
capote. Su labor de muleta ha sido de mucha técnica, poder y sabiduría por
ambos lados a un ejemplar soso y débil, sobresaliendo los momentos que logró
por naturales ayudándose y a pesar también del viento. Mató de pinchazo y
estocada entera para hacerse aplaudir.

En su segundo jugó rítmica y templadamente los
brazos en estéticos lances a la verónica. Con la franela, a base de poder y
buen toreo, pleno de mando, dominio y valor, logró una labor sobre las dos
manos de gran mérito a pesar de la sosería y poca fuerza de su antagonista.
Concluyó de pinchazo hondo, el subalterno español Víctor García de forma
indebida ahondó el alfanje, Urdiales tiró cinco golpes de descabello y terminó
escuchando un aviso para tener silencio.

El diestro anfitrión Arturo Macías en el
primer astado de su lote dio una larga cambiada de rodillas al hilo de las
tablas para luego de pie, no obstante el viento, lancear a pies juntos y
rematar todo con una tafallera, una gaonera y una caleserina, pero lo más
plausible lo realizó en un quite por gaoneras en los medios con empeño. Su
quehacer muleteril, a un ejemplar soso igualmente pero con algo más de
movilidad, fue de mucha variedad y empeño por los dos pitones, adoleciendo por
momentos de continuidad, destacando algunos derechazos templados y por ese lado
fue por donde gracias al molesto viento y a un descuido el toro lo empitonó por
el muslo izquierdo, desgarrándole la taleguilla, además de sufrir un fuerte
golpe en la frente. Fue auxiliado por las asistencias y volvió a la cara para
seguir con la mano derecha y concluir por joselillinas hasta sufrir otro
achuchón. Se perfiló para entrar a matar y dejó un pinchazo hondo, otros dos y
una estocada que atravesó para escuchar división de opiniones tras un aviso.

A su segundo lo recibió con una chicuelina
cerrado en tablas y después sin mucha limpieza lanceó a pies juntos. Con la
tela escarlata, tras brindarle al diestro en retiro y maestro de toreros aquicalidense
Luis Fernando Sánchez, empezó su trasteo de rodillas y por alto para después de
pie ir eslabonando series bien intencionadas, sobre todo por el pitón derecho
pero sin el fondo para prender animosamente ya que el astado evidenció
igualmente sosería y falta de emotividad. Más toreo de hinojos y ya
incorporado, Macías acortó la distancia para lograr algún muletazo que rubricó
con desplante que no gustó a la concurrencia. Finiquitó de pinchazo, estocada
que atravesó y descabello para tener silencio.

En el primer ejemplar que le tocó en suerte,
el también matador local Fermín Espinosa «Armillita IV” veroniqueó con empeño y
facilidad. En el tercio de varas el joven varilarguero Guillermo Cobos fue
desmontado. Con la sarga, a un astado soso, corto y rajado, le paró bien el
torero por los dos perfiles en su afán por querer estar a la altura de las
complicadas circunstancias. Siempre estuvo firme y con actitud para lograr
algún pasaje meritorio. Terminó de estocada algo trasera y atravesada para
tener división de opiniones con más palmas que pitos.

Y en el burel que cerró el festejo dio una
larga cambiada de rodillas en la zona de tablas para luego de pie lancear
empeñoso. Con la muleta ha mostrado de la misma forma una evidente disposición
por los dos pitones, siendo protestado de manera injustificada por un sector
del público. Aun así Fermín le puso oficio y aguante para terminar de pinchazo
hondo sin soltar y estocada desprendida para retirarse en silencio.

FICHA DEL FESTEJO

AGUASCALIENTES, Aguascalientes. 17-Abril-2016.
Primera corrida de la CLXXXVIII Feria Nacional de San Marcos. Coso Monumental.
Entrada: Menos de media en tarde entoldada con algo de viento.

Toros de Bernaldo de Quirós, sosos y
descastados, siendo el segundo y el cuarto los que tuvieron un poco más de
mayor movilidad.

Diego Urdiales, quien debutó en esta plaza:
Palmas y silencio tras un aviso.

Arturo Macías: División de opiniones tras un
aviso y silencio.

Fermín Espinosa «Armillita IV”: División de
opiniones y silencio.

INCIDENCIAS: Durante la lidia del tercer toro,
el varilarguero Guillermo Cobos sufrió un tumbo.

Foto: Emilio Méndez