Será en San Miguel este fin de semana cuando el novillero Ángel Jiménez, que ha destacado en numerosas ferias menores y en cosos como Madrid o Sevilla en los últimos años, tome la alternativa de manos de Morante y en presencia de El Juli.
Será con toros de Daniel Ruiz, ¿cómo preparas esa cita? Es el final de un camino dilatado en varias temporadas que tendrá final feliz.
Ha sido una etapa larga, en la que he vivido muchas facetas pero muy bonita, porque he podido obtener triunfos en Madrid y Sevilla y el broche viene en San Miguel, con la alternativa con dos figuras del toreo y un escenario de ensueño.
Habíamos escuchado tu nombre desde aquella tarde de Valdemorillo.
Sí, luego hubo un parón y la oreja de Madrid el 7 de mayo me relanzó, además de la novillada de Partido de Resina en Sevilla, que me dio aire para entrar en las ferias novilleriles.
Cuando fuiste a Madrid llevabas más de un año sin vestirte de luces.
Era una apuesta fuerte pero hoy día sabemos cómo está el circuito novilleril. Se apostó fuerte y confiaron Madrid y Sevilla, y aquel 7 de mayo le corté la oreja en Madrid a un novillo de Mayalde. Se abrieron las puertas para Villaseca, Villa del Prado, Arnedo, Calasparra… y matar la novillada de triunfadores de Las Ventas.
Aunque esté estructurado mal el sistema novilleril y haya que ir a las ferias grandes para ir a los pueblos luego, ¿ha sido justo este sistema para tu carrera?
Sí, lo ha sido. A lo mejor he tenido oportunidades muy precipitadas, pero las he tenido. También he sufrido un parón, pero ha sido justo porque tras esa oreja en Madrid, estaban llamando las comisiones de las ferias importantes. En el Corpus también llamaron tras el encierro de Partido de Resina, y los pueblos saben valorar lo que se hace en el ruedo.