La Feria de Pascua de Arles ha concluido con un balance sobresaliente y un éxito a todos los niveles: artístico, ganadero y de afluencia de público. El Coliseo ha vivido, bajo la batuta organizativa de Juan Bautista, cuatro intensas jornadas de toros en la que se ha abierto en nueve ocasiones la Puerta Grande y han embestido las cuatro corridas de toros, incluida la de rejones; A todo ello hay que sumar el alto nivel de los novilleros y el gran ambiente vivido con una plaza que ha tenido una gran respuesta de público con una plaza prácticamente llena el domingo y tres cuartos el resto de festejos mayores.
Entre los toreros han salido a hombros Sebastián Castella y Clemente con una gran corrida de El Parralejo donde tomó la alternativa Tristán Barroso que no salió izado en hombros por el mal uso del acero; El domingo, fueron Emilio De Justo, Roca Rey y Tomás Rufo quienes abrieron la Puerta Grande tras una tarde para el recuerdo frente a una encastada y brava corrida de Jandilla; Y el lunes, Fernando Adrián cautivó frente al mejor lote de la corrida de Virgen María que lidió tres ejemplares muy importantes.
Lo vivido en la matinal de rejones, fue un espectáculo total y brillante. Con un entradón en el Coliseo, Andy Cartagena, Lea Vicens y Guillermo Hermoso de Mendoza se repartieron siete orejas y emocionaron al cónclave. Las dos novilladas han tenido un gran contenido artístico, con actuaciones de consideración de Tomás Bastos o Aaron Palacio, además del debutante Víctor.
Y dentro del éxito general, hay que destacar la Corrida Camarguesa que abrió el ciclo que fue un espectáculo vistoso y mucho contenido y que además tuvo una gran respuesta de público.