El nacimiento de un toro bravo es siempre un motivo de orgullo no sólo para el propio ganadero, sino para toda una afición cuyo rey es el principio de todo. En este caso reparamos en uno de los primeros nacimientos bravos del 2021, un año clave para el futuro de la tauromaquia por la gravísima crisis del COVID que estamos atravesando.
Lo protagoniza «Langosto», un becerro ensabanado de la ganadería de Fraile Mazas nacido en una de esas noches «en las que sólo aguantan los más fuertes» La saga de los «Langosto», además, es una de las más importantes en esta ganadería de encaste Atanasio-Lisardo.
De hecho, el termómetro marcaba – 4°C. «Seguimos luchando por mantener nuestra ganadería, con la ilusión intacta», añadía la ganadería charra a través de la citada red social.
La otra realidad del campo bravo charro: el lobo mata decenas de becerros en el último mes en la ganadería de Domingo Hernández: «La madre recién parida no puede atacar»
La ganadería brava de Domingo Hernández ha denunciado en las últimas semanas la muerte de más de 60 animales por ataques de lobo en este año 2020 entre becerros y añojas bravas y cerdos ibéricos. Así lo ha puesto de manifiesto en declaraciones a CULTORO el ganadero Domingo Hernández: «Los ataques de lobo se llevan intensificando en nuestra finca desde hace un año y medio aproximadamente. Lo que antes era de forma puntual se ha ido convirtiendo en algo más y más grave», denuncia el joven ganadero charro.