No todos los ganaderos de bravo tienen las mismas pretensiones de cara al futuro; mientras que el objetivo de algunos es lidiar en las principales plazas, otros tienen esto como una aventura romántica, un lugar donde refugiarse con su familia y disfrutar de aquello que te regala el campo. Evidentemente, hay tantas ganaderías como ganaderos, por lo tanto, cada uno de ellos tendrá trazado un camino para el medio plazo.
El caso de Benjamín Gómez es diferente al resto, siendo éste un aficionado al mundo de toro que tiene una punta de vacas muy seleccionada junto a dos sementales. Su objetivo es disfrutar en su casa y con sus amigos de las pocas crías que nacen a lo largo de año. Con tal número de vacas es prácticamente lidiar en una plaza de toros, algo que ha intentado sortear hasta conseguir tener seis machos con los que poder acudir a una plaza de toros.
Además de José Escolar, la Feria de Sotillo de la Adrada contará con otra ganadería de la zona, Benjamín Gómez, de La Iglesuela. Encaste Santa Coloma y en tipo. Hay que defender lo bueno que hay en cada territorio. pic.twitter.com/jyjXKc9SJh
— Marcos Sanchidrián (@todosalostoros) August 24, 2018
La historia ganadera de Benjamín Gómez
El número tan reducido de animales no ayuda a tener una camada uniforme, pese a ello, poco a poco está consiguiendo que los machos sean algo más parejos, y que las hechuras de estos sean más homogéneas. Una punta de vacas con origen Araúz de Robles, pero de la parte Saltillo -el conde de Santa Coloma creó esta ganadería a base de reses de Ibarra y de Saltillo en 1905-, quedando fuera de la ecuación la simiente Gamero Cívico. “La ganadería nace porque nuestros abuelos tenían vacas y estaban de ganaderos en este pueblo; de ahí nos sale la vocación de crear la ganadería. En principio echamos vacas de carne, limusinas, pero con el tiempo por meter bravas para hacer herraderos y tentaderos”.
“La ganadería nace en el año 1998 con 16 vacas y 2 sementales, procediendo todo de la vacada jiennense de Araúz de Robles. Estamos ubicados en la Ilglesuela del Tiétar, en Toledo, esta es una finca pequeña, pero tiene plaza de tientas, y con eso podemos disfrutar cada año de un par de tentaderos”, nos comentaba Benjamín Gómez.
Una vacada muy corta que sigue manteniendo la misma estructura que al principio: “Tenemos 16 vacas de vientre y lidiamos muy poco. La tenemos a capricho, cuidamos mucho el ganado para que esté muy bien. Para lidiar el año que viene tenemos siete utreros para sacar en alguna novillada. De momento, no están vendidos, ojalá podamos verlos embestir en un festejo a lo largo de la temporada venidera”.
@AAguilarmatador en la ganadería de Benjamín Gómez pic.twitter.com/uzblnzJ8U1
— Antonio Aguilar (@AguilarAntonioL) April 9, 2018