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La brutal pelea entre dos toros de Luis Algarra que sucedió el domingo: casi la emprenden contra el todoterreno


lunes 30 octubre, 2023

La pelea de tres toros en un cercado puso en riesgo la integridad física del propio Luis Algarra

El toro bravo es jerárquico por naturaleza, un animal dominante que lucha por el poder de la manada incluso con su vida. Una batalla que muchas veces cuenta con la intromisión de un tercero, ese que decanta la pelea en favor de uno de sus hermanos.

El cambio de la presión atmosférica que da paso a las borrascas, la entrada de nuevos hermanos en el cercado, el olor a vacas en las cercas contiguas… todo influye para que se encienda la mecha y se provoque una batalla. Al contrario que los animales carnívoros, el toro no ataca para alimentarse, sino para ser el líder único de la manada.

Como ya reflejamos de pasada en las primeras líneas, el problema no viene en una pelea cuerpo a cuerpo entre los líderes, ahí ambos luchan en igualdad de condiciones, la gravedad viene cuando un tercero aprovechando el cansancio de uno de los oponentes entra en escena y resuelve la ecuación. Pese a estar enfundados, ahí es cuando existe el mayor de los riesgos de cara a una posible baja de uno de los contendientes. Al entrar de costado y no de frente desequilibra al su hermano, creando superioridad numérica y decantando la pelea. Una vez en el suelo se enseñarán con el perdedor hasta matarlo. Es la ley del más fuerte.

En ganaderías donde hay cercados grandes es fácil que se den varios grupos donde existe un líder destacado, pero en ganaderías con espacios más reducidos los animales están acostumbrados a verse las caras, pese a ello las peleas también son frecuentes. Por ello el mayoral y los vaqueros no se pueden dormir en los laureles, teniendo que estar muy atentos para evitar estos enfrentamientos, esos que con su voz ayudan a calmar a estos animales cuando se avecina pelea.

Un encontronazo cara a cara, un enfrentamiento entre dos toros que estuvo muy cerca de arrollar a Luis Algarra cuando este grababa desde dentro de su 4X4. En las imágenes también se puede escuchar las palabras de un ganadero que pasó un gran susto al ver como los animales pasaron a escasos 2 metros de su vehículo.

Allí únicamente se encontraba Luis Algarra, hijo del mítico ganadero sevillano y hermano de Aurora, la actual ganadera de un hierro que en sus manos ha dado un paso adelante en la continuidad del legado que les dejó su padre. Casi 20 años después de su repentino fallecimiento, en la Capitana se sigue cuidando con mimo aquello que les legó un ganadero formidable, ese que siempre tuvo en la cabeza el toro que quería criar.