Hablábamos hace unos días de esos lugares que daban cobijo al toro bravo, zonas de la Península Ibérica donde este campa a sus anchas por grandes cercados. La Comunidad de Madrid es uno de esos lugares que esconde rincones muy especiales, zonas donde el toro bravo ejerce su papel de líder como lo hace el león en la sabana o el tigre de bengala en la selva. El Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama es uno de esos puntos donde el animal bravo disfruta de tan ansiada libertad, ese en el que conviven con otras especies tanto domésticas como salvajes.
Una zona donde se encuentra la vacada de Aurelio Hernando, criador de bravo que el pasado año trasladó todo su ganado desde “La Gamonosa” -lugar donde pastaban las hembras- a “Cerca del Cura”, ubicada esta muy cerca de Soto del Real, en pleno Parque Nacional de Guadarrama, a los pies «La Pedriza». Allí se asienta un proyecto ganadero que tiene al toro jabonero -en sus diferentes variantes- por bandera, ese que también tiene su hueco para el albahío, el melocotón, los negros negro, castaños, coloraos o incluso berrendos.
En la actualidad, la vacada “veragüeña” está compuesta por 170 vacas divididas en cinco lotes, con ocho sementales. La primavera es una época de paridera, y si a eso le unimos el verde del campo tras las incesantes lluvias que han regado el campo bravo desde mediados de octubre, nos encontramos con estampas de gran belleza donde el animal bravo destaca por encima de todo. Para conocer más sobre su camada de 2025 nuestro compañero Pablo Ramos se trasladó hasta el cuartel general de esta vacada para fotografiar la camada al completo del hierro.
Para la temporada 2025 hay 5 novilladas picadas, una de ella reseñada para Madrid en verano, una novillada sin picar y tres toros para la Copa Chenel el día 14 de junio en Navas del Rey, además de otra corrida más de toros de bonitas hechuras por la que se han preocupado varias empresas, pero aún está por encontrar un destino final.
FOTOGALERÍA: PABLO RAMOS











































