En la finca ‘Puerto de la Calderilla’ ya están rematados los animales que este 2025 saltarán a los distintos cosos que han apostado por esta ganadería salmantina. José Juan Fraile tiene la camada prácticamente lista, los toros están separados por tipo de plazas, todos andan con las fundas puestas, por el momento no hay problemas que hagan peligrar los compromisos adquiridos con las empresas. Aquí se mantiene muy vivo el encaste Atanasio-Lisardo, ese que convive con esos toros de la rama Domecq marcados a fuego con el segundo hierro de la casa.
Un proyecto ganadero que sigue con un rumbo fijo, ese que no se modifica por las modas de los toreros. Aquí se busca un animal muy particular, un tipo de toro que les llene como aficionados. La familia Fraile ha conseguido darle su sello a dos encastes que tienen grandes diferencias, esos que se distinguen tanto por sus hechuras como por su comportamiento en el campo y la plaza. Hasta salamanca se fue nuestro compañero Pablo Ramos para fotografiar una camada que entra por los ojos nada más verla.
Se trata de una camada muy en tipo de la casa, ya sean estos de la rama Atanasio-Lisardo o Domecq. Toros que destacan por su seriedad, siendo los animales reseñados para Madrid aquellos que mayor trapío tienen. Pese a esa citada seriedad no son ejemplares fuera de tipo, siendo estos bajos y cortos de manos pero fuertes por delante. Allí nos atendió José Juan Fraile representante de la ganadería, quien subido en un 4×4 adentró a nuestro compañero por los distintos cercados de la vacada. Fue su propio hijo -del mismo nombre- quien colocó a los toros para realizar el reportaje, sacándolos a caballo de sus cercados con destreza y valentía. El relevo en esta ganadería está asegurado pese a tener todavía 11 años de edad.

“Llevamos una ganadería que difiere un poco del resto; es un encaste diferente, pero sí que podemos hablar de Puerto de San Lorenzo con una base de Atanasio-Lisardo consolidada hace años en nuestras manos” comentaba a este medio un ganadero que conoce a la perfección esta rama de su ganadería. “Llevamos con este proyecto desde hace varios lustros, algo difícil de ver hoy en día. Esta es una joya genética de incalculable valor pulida con los años, nuestra apuesta por este tipo de toro creo que es clara” nos explicaba José Juan sobre los animales de este encaste en peligro de extinción.
Pese a existir en esta casa toros de rama Domecq muchas son las figuras que apuestan todavía por el toro del Puerto, un tipo de animal con unas características muy particulares: “Las figuras del toreo conocen perfectamente nuestra ganadería y si las lidian es porque consideran que están en buen momento. Nosotros hemos estado siempre en ferias importantes con este tipo de toreros, y este año no será menos”.
Un 2025 donde la vacada hará doblete en Madrid en una temporada muy relevante para ellos: “Lidiaremos un número similar a la pasada temporada. Tenemos 12 corridas de toros de las cuales dos irán a Las Ventas. Es una camada muy homogénea, de buenas hechuras y una presencia acorde para cualquier tipo de plaza”, explicaba a este medio el ganadero salmantino.
Istres con Miguel Ángel Perera, Diego San Román y Christian Parejo en el cartel, y un toro en la despedida de El Capea en Guijuelo son otras de las plazas donde saltarán esta campaña los animales de la familia Fraile. Antes de ello hay un compromiso de altura durante la Feria de San Isidro, una piedra de toque con una terna compuesta por el alicantino José María Manzanares, el madrileño Fernando Adrián y el sevillano Pablo Aguado el 16 de mayo.
FOTOGALERÍA: PABLO RAMOS







































