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La curiosa forma de los novillos de Victorino de ‘inspeccionar’ una nueva cerca: Miriam Martín se acerca a ellos


jueves 28 marzo, 2024

Con la llegada de las altas temperaturas, los ganaderos empiezan a preparar la temporada introduciendo a los utreros en el pienso.

Victorino
Dos momentos del vídeo. © YouTube

Con la llegada del verano -aún estamos en primavera- los ganaderos dan un paso más en la preparación de los animales de cara a la temporada venidera. Así, en casa de Victorino Martín, como pasa en otras ganaderías, han tenido que adelantar en los últimos años la fecha para la entrada de los utreros al pienso.

Los novillos de Victorino pasan a uno de los cercados más amplios de la ganadería, allí donde convivirán hasta ser conducidos a uno más pequeño destinado a corridas. En esta casa no corren a los animales, de ahí que opten por tenerlos en cercados muy amplios donde se muevan constantemente buscando el agua y la comida. Los animales no conocen este lugar, por ello necesitarán un tiempo de adaptación hasta conocerlo plenamente.

Como es normal, cuando se cambian de cerca, surgen peleas por el poder para dirimir quien es el líder, por ello, el mayoral debe estar atento a cualquier tipo de lesión yo cornada. Aquí ya no hay juegos como años atrás, ahora son adolescentes que ya conocen de que va la película, por ello los primeros escarceos son habituales. Al haber un número ingente de utreros y ser un cercado tan amplio, habrá subgrupos de animales, ocupando las zonas más frescas en verano aquellos que ostentan el poder.

Son los novillos nacidos en el año 2020, es decir, los toros que se lidiarán la temporada venidera. Al cambiarles el pasto por pienso, este deberá ser progresivo, más si cabe en tiempos donde la comida va a escasear. Por eso deben explorar su nueva cerca, saber donde está el agua y la comida, para así ir poco a poco tomando ese remate tan necesario para su lidia en la plaza. Al no ser una ganadería especialmente dada a lidiar novilladas, prácticamente todos los utreros están destinados a lidiarse como cuatreños, o en su caso como cinqueños.

Unos animales que deberán socializar más con el ser humano, durante su etapa de añojos y erales han estado en un lugar más apartado donde apenas se les molestaba, de ahí que tiendan a buscar las zonas más agrestes y escondidas cuando entra en el cercado algún 4×4 o los propios caballistas. Ahora reniegan de ellos, los tienen como extraños, de ahí que en esta grabación muchos de ellos se alejaran de la zona donde se estaba grabando el reportaje.