CARTA

A la sinrazón de Urtasun


sábado 4 mayo, 2024

El matador de toros y apoderado salmantino toma la palabra para contestar al Ministro de Cultura del Gobierno de España

Paco Ureña
Paco Ureña, en la pasada Corrida de la Prensa. © Luis Sánchez Olmedo

A Urtasun.

Para el que no me conozca soy Juan Diego he sido 25 años matador de toros y he tenido el orgullo y el privilegio de representar a mis compañeros durante 10 años ante la administración y jurado del premio nacional. Me acostumbré en ese tiempo a navegar en este tipo de noticias y a trabajar al lado de representantes con el mismo perfil que el del ministro de Cultura actual.

Lo primero, quiero disculparme con quien lea estas palabras por el trato que dispenso al ministro. Me rechina, incluso, no dirigirme a él con la educación que sería lógica, pero entiendo que en la vida todo debe tener una reciprocidad y Urtasun no demuestra tener ninguna educación ni respeto para con mi profesión ni conmigo.

Estos representantes a los que me refiero, suelen tener características comunes: soberbios y ególatras, ya que se arrogan la capacidad de decidir lo que es la cultura de un pueblo. Encuentro difícil hacer una definición más perfecta de totalitarismo que decirle a un pueblo lo que 300 años atrás ha hecho y debe dejar de hacer.

En lo particular, la mayoría de ellos se han significado mucho más por quitar por prohibir por limitar con la bandera de un liberalismo sectario, que solo ellos entienden, que de conseguir hacer un trabajo en positivo y potenciar los sectores de la cultura que sean capaces de acabar con la fuerza social que tiene la tauromaquia y que por sí sola muriera. Pero no es así, imponen su criterio, quitan y prohíben y les dicen a todo el mundo en qué están equivocados.

Ojalá cuando se vaya, que se irá como se han ido muchos otros, no sea la única muesca en su revólver el haber quitado un premio a la tauromaquia a ver si se le reconoce por ser un ministro que creo que construyó o que potenció aunque sea la parte de la cultura que le satisface. Espero que no sea la única huella que deje en su paso por un ministerio que cada vez es más utilizado como bandera política que como defensa cultural.

Con todo humildad y lejos de querer imponer mis criterios como hace este político, le recomendaría que revisara las encuestas de hábitos culturales que desde este mismo ministerio se hacen y comprobar el perfil tanto del aficionado a los toros como del músculo social que tiene la tauromaquia en estos momentos, a pesar de estar constantemente perseguida y golpeada por una parte de esta nueva clase política que se significa por la prohibición por quitar, por intentar imponer su criterio en vez de por la lógica defensa y promoción que debería imponerle su cargo.

Le invitaría a hacer un liviano repaso sobre el impacto económico y ecológico que tiene la tauromaquia en España solo para que tenga un conocimiento del que sospecho carece, pero no como argumento, porque ya estamos cansados de tener que defender las cosas como si tuviéramos que justificar mucho más nuestra existencia que la de otros. Ese músculo económico, que impacta mucho más que otras disciplinas culturales, de las que sí se muestran orgullosos de intentar potenciar y que no han revertido a las arcas del Estado ni una mínima parte que lo hace la tauromaquia y lo ha hecho durante toda la historia.

Y por último, le agradecería que como mal menor se olvidara de nosotros, que nos deje usted en paz que ha habido otros ministros, que no habiendo aportado nada habiendo sido un cero habiendo dejado poco después de ocupar su mismo puesto…han sido más positivos que usted que parece solo interesado en restar. Al final no es el premio, ni mucho menos la dotación económica, es solo disfrutar del foco mediático que en ningún momento he visto tan pendiente de él como cuando ha tocado la tauromaquia.

En fin… las latas vacías son las que hacen más ruido.

Juan Diego Vicente Hernández