SUSTITUCIÓN

Cayetano, con un sustituto de lujo para este viernes en El Puerto


martes 8 agosto, 2023

Sebastián Castella y Daniel Luque completan un cartel en el que se lidiará un encierro de Montalvo.

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Cayetano en un patio de cuadrillas.

El diestro Cayetano Rivera, convaleciente del percance sufrido el pasado domingo en la plaza de toros ciudadrealeña de Socuéllamos, ya tiene un sustituto de auténtico lujo para este viernes en la corrida programada en El Puerto de Santa María: será el riojano Diego Urdiales quien entre en su puesto, tal y como ha comunicado oficialmente en el mediodía de este martes la empresa Circuitos Taurinos. Sebastián Castella y Daniel Luque completan un cartel en el que se lidiará un encierro de Montalvo.

Recordamos que Cayetano Rivera viajó en la noche del pasado domingo hasta Santander para ponerse en manos de un especialista y ser operado de urgencia: «Siento comunicaros que mañana no podré estar en Estella con mis amigos y compañeros Pablo y Guillermo Hermoso. Tras sufrir un percance hoy en Socuéllamos mañana pasaré por el quirófano para operarme de la muñeca», señaló el torero en Twitter.

Todo ocurrió cuando, en la corrida en el citado municipio ciudadrealeño, un toro de Apolinar Soriano lo prendió cuando estaba sacándolo del caballo. La aparatosa voltereta lo dejó muy dolorido en el suelo teniendo que pasar directamente a la enfermería y quedando la corrida en un mano a mano entre Curro Díaz y Antonio Linares.

Diego Urdiales, un sustituto de categoría

Diego Urdiales
Diego Urdiales. © Luis Sánchez Olmedo

Diego Urdiales regresará a una plaza tras la gran obra de Azpeitia. En el coso vasco, toreó aquella tarde al cuarto de Ana Romero con primor y compás. Henchido de torería, su enjuto rostro se fue transfigurando según avanzaba la faena en una sonrisa que brotaba de lo más íntimo. Hubo series de naturales de temple prodigioso, largo el trazo, asentado sobre riñones y talones. Corría la mano Diego, ajustado el embroque, y el buen toro de Ana Romero se iba tras la muleta poderosa y sutil a la vez del torero arnedano en una faena que fue un crescendo de torería. Hundió el estoque en lo alto Urdiales, rodó el toro y todos, pañuelos al viento, premiaron la obra.