Como contamos en anteriores ocasiones, no todos los toros que llegan a Pamplona son lidiados en su plaza de toros. Los ganaderos anunciados en las fiestas de San Fermín acuden con un total de 8 toros para evitar que la corrida no se lidie completa -excepto Miura, que va con 7-. Como suele ocurrir en otras plazas de primera, garantizarse los dos sobreros es clave por si existe algún tipo de percance durante el encierro o en la propia plaza.
Los ganaderos deben estar ojo avizor nada más, desembarcar los toros en la capital navarra, y decimos esto porque se pueden dar peleas entre los animales que acaben provocando bajas. Al no tener fundas, el animal se siente más poderoso, sabe que hace más daño, de ahí que se tenga que estar muy pendiente, por si surgen peleas que obliguen a una rápida intervención por parte de los empleados de plaza.
Un encierro de Cebada Gago de imponente presentación que no fue del gusto de una terna que vio como la nobleza sin entrega de unos y el genio de otros provocaba que ninguno de los toros rompiera de verdad cuando se les exigió por abajo. Una tarde donde el diestro mexicano paseó una oreja de cada animal que le cupo en suerte, Adrián de Torres se fue silenciando tras una tarde de gran esfuerzo, mientras que Román vio recompensada su porfía con el cariño de la afición.
Pero la polémica vino por la mañana al conocer los 6 toros de Cebada Gago que correrían el encierro de los toros venidos de tierras gaditanas de Medina Sidonia. El imponente n.º 78 se quedaba finalmente como sobrero, entrando en la corrida el n.º 42 un toro más recortado de cuerna que no acababa de convencer a la afición.
El primer Cebada Gago (n°42) correrá el encierro, mientras que el segundo (n°78) queda como sobrero. ¿Alguien me lo puede explicar? ¿Por qué se llama feria DEL TORO? pic.twitter.com/3XGSCuWElb
— Ardi (@_elfinde_) July 8, 2023
Entre carreras extraordinarias y un colorao corriendo por su cuenta, los «cebadas» dejaron una cornada en un brazo y una carrera de 2.52 minutos. Un encierro donde no estuvieron dos de los toros mandados desde la Zorrera hacia la capital navarra, dos animales de Cebada Gago que quedaron como sobreros y que hoy ya van camino de esa Medina Sidonia donde esperarán destino.