ENTREVISTA

"Cuando tú escoges entregar tu vida al toro, lo haces también con un contrato de resiliencia ante situaciones como la que estamos viviendo"


martes 27 octubre, 2020

Joaquín Galdós afrontará una primera parte del invierno en Perú y, a partir de enero, en España. Nos cuenta sus planes y, sobre todo, cómo vive un torero joven todo lo que está ocurriendo en el mundo.

Joaquín Galdós afrontará una primera parte del invierno en Perú y, a partir de enero, en España. Nos cuenta sus planes y, sobre todo, cómo vive un torero joven todo lo que está ocurriendo en el mundo.

Joaquín Galdós finalizó la triste temporada del COVID el pasado domingo en Montoro. Fue frente a una seria corrida de Alcurrucén en edad y en trapío de la que la calidad de su primero le dejó expresarse: «La corrida tuvo dos mitades muy distintas, la primera y la segunda: mi primer toro tuvo cualidades y pude hacer una faena muy buena de capote y de muleta. Los dos últimos toros son los típicos que hay que lidiar y matar. Uno se intenta poner pesado para mostrar las ganas, pero realmente eran toros muy complicados, para lidiarlos», explica el torero peruano. 

«Afrontaba la tarde con mucha ilusión. Había toreado dos corridas de toros tras el confinamiento y tenía ilusiones puestas en esta corrida. Sí es verdad que cuando no se me concedió la segunda oreja, me decepcioné un poco, y cuando salió el primer toro se truncó un poco la cosa», afirma sobre las sensaciones de la última tarde de su año. 

Ahora, afrontará la primera mitad del invierno en Perú, o al menos esa es su intención: «Tengo intención de irme cuanto antes, en cnato haya un vuelo de repatriación, para pasar Navidades con mi gente, y si todo va bien volver en enero para seguir pasando el invierno en España», relata sobre sus planes en los próximos meses. 

Sobre cómo está sintiendo un torero joven todo lo que está ocurriendo, después de haber entregado su adolescencia y juventud a este rito, Galdós confiesa que «hay que aguantar: no guardo ningún rencor a nada, porque todos estamos siendo víctimas de ello. Cuando tú escoges entregar tu vida al toro, no lo haces con un contrato de tener que torear 40 todo el año, sino un contrato de resiliencia también contra situaciones así. Ser torero está por encima de todo eso. Haya que seguir viviendo en torero, como cada uno pueda, en la medida de sus posibilidades. Hay que esperar, como siempre han sido las carreras de los toreros. Al final, esto es una carrera de largo fondo», concluye el joven. 

FOTOS: DAVID HERNÁNDZ – ANFt