Este viernes comienzan las fiestas taurinas de Alcalá de Henares y eso es una gran noticia para el mundo del toro tras años en los que la fiesta ha sido maltratada por diversos motivos con la política por bandera.
Alcalá es uno de los núcleos fundamentales del Corredor del Henares y tiene una historia en la que el mundo del toro es protagonista. No debemos olvidar que es la tierra donde nació Cervantes y Patrimonio de la Humanidad y en ella la tauromaquia ha jugado un papel fundamental.
El derribo de la antigua plaza de toros situada en el centro de la localidad fue un duro golpe para la afición de la zona a la que le ha costado acudir a la nueva plaza situada en las afueras hasta que el desarrollo urbanístico la está integrando a la ciudad.
Es importante que la Comunidad de Madrid recupere su peso y no dejar perdernos un núcleo fundamental de afición poniéndoselo fácil a políticos de toda condición. Triste es ver los casos como el de Móstoles y otras localidades en las que los festejos a pie van siendo olvidados.
Este año el torero que más capacidad ha tenido para llenar esas plazas, El Juli, ha dado un paso adelante en su año de despedida y acude a dar un espaldarazo al buen trabajo que están haciendo Jorge Arellano y Manuel Chopera. Ambos han diseñado una feria en la que alrededor del madrileño se presenta la gran esperanza del toreo como es Tomás Rufo y vuelve por un día a su casa el torero que más ilusionó a la ciudad complutense, Matías Tejela.
El día antes los mediáticos se citan para dar la alternativa al novillero que más ilusión ha despertado en la zona como es Víctor Hernández que salió a hombros en la plaza de Madrid.
Con una apuesta brutal por la publicidad que se puede ver por los autobuses, marquesinas y centros comerciales de la localidad, es el momento de que el aficionado responda con entradas a precios tan asequibles como 18€. El trabajo se ve con una acertada política de comunicación en la que se da grandeza como signo para atraer al público.
Sin duda debemos recuperar terreno paso a paso y el reto de Alcalá es fundamental para el mundo del toro.