Este mes de diciembre, el subalterno charro Domingo Siro ha dicho adiós a los ruedos tras haber toreado cerca de tres mil festejos desde septiembre de 1990 hasta el pasado octubre en el que se vistió de luces por última vez, según adelanta el periodista Javier Lorenzo en La Gaceta de Salamanca.
Desde sus inicios se marcó el reto de vivir del toro y del toro terminó haciendo su vida. Nada más estrenarse con el vestido de plata entró en la cuadrilla de El Niño de la Capea y tuvo el privilegio de cerrar el círculo este año junto a otra primera figura, José María Manzanares.
Desde la redacción de Cultoro le deseamos la mejor de las suertes.