La del pasado domingo no fue una tarde más. Ha sido una página dorada en el libro del toreo. Lo vivido en la Corrida de la Beneficencia en Las Ventas ha trascendido el hecho artístico para convertirse en un acontecimiento cultural, social y, por qué no decirlo, casi espiritual. Morante de la Puebla ha saldado su cuenta pendiente con Madrid. Y lo ha hecho a lo grande, como mandan los cánones de los elegidos, saliendo por la Puerta Grande en una de esas tardes que no se olvidan ni se repiten fácilmente.
A continuación exponemos una fotogalería de las dos tardes de Morante de la Puebla en Las Ventas durante la pasada Feria de San Isidro tras el objetivo de Luis Sánchez Olmedo:
