JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO
Simón Casas, en una entrevista publicada este viernes en CULTORO, ha señalado respecto al bombo en la feria de San Isidro que «el bombo dije que lo inventé desde un principio con éxito pero que debía ser una medida excepcional y, si acaso, anual en Madrid en la feria de Otoño para darle identidad propia a esa Feria. No creo que sea necesario vulgarizar el bombo».
Asimismo, explica que «tiene que ser una cosa excepcional y un patrimonio propio de Las Ventas y de la Feria de Otoño. Con todo eso, se ha planteado la hipótesis de una parte de bombo en la Feria, porque no se pueden sortear 25 corridas de toros. No sé si se va a poder llevar a cabo ni sé si es necesario. En la Feria, la primera necesidad del aficionado es que sea una gran Feria, con bombo o sin él. Lo que no abandono es el bombo como identidad propia de la Feria de Otoño».
En San Isidro «tengo que respetar a los toreros, porque el bombo no depende solamente de mí. Hay que respetar a los toreros, hay que respetar la coherencia y al público, que quiere una feria bien programada en la que no falte nadie. Antes de jugar a más creatividad de lo necesario, lo primero que tengo que hacer es intentar montar un San Isidro donde no falte nadie. Lo que sí sabemos es que el Domingo de Ramos será de Victorino Martín la corrida, y el Domingo de Resurrección habrá un buen cartel también. Tres novilladas previas abrirán la temporada en Las Ventas. Los demás carteles no se han visto porque de momento estoy trabajando en los carteles de la Feria de Valencia», concluye.